Un detenido y al menos 16 investigados, entre ellos tres médicos, por tráfico del ansiolítico Rivotril en Cangas y Vigo

CANGAS

EP

Entre los implicados hay al menos tres médicos, varias farmacias y algún menor. Este ansiolítico se emplea para fabricar el karkubi, una peligrosa droga cuyo uso va en aumento entre los jóvenes

13 feb 2025 . Actualizado a las 12:51 h.

La Guardia Civil ha puesto en marcha una nueva operación para acabar con el mercado negro del Rivotril, un ansiolítico que se emplea para elaborar karkubi, la también llamada droga de los pobres o ampolla roja y que está ganando popularidad entre los jóvenes. Popular en Marruecos desde hace más de una década, con la pandemia migró a España. Las primeras alertas en Galicia saltaron en las calles de Cangas hace dos años y ahora la Guardia Civil intenta frenar un consumo y tráfico que ha ido a más en el área de Vigo y en O Morrazo .

Hay al menos dieciséis personas investigadas, entre ellas tres médicos de Cangas y Vigo por un delito contra la salud pública vinculado a la expedición y uso fraudulento de recetas para la obtención de este medicamento que mezclado con el hachís, el alcohol y el pegamento da como resultado una droga que hace estragos. Además se investiga la posible vinculación en el caso de varias farmacias y también algún menor. Esta nueva operación arrancó en septiembre, cuando se detectó en Cangas el caso de un joven de 15 años que había ingerido este peligroso cóctel y que tuvo que recibir asistencia médica. El que le vendió la droga también era un joven del municipio de unos 20 años.

Es precisamente el incremento del consumo entre los adolescentes y menores uno de los factores que más preocupa a sanitarios, familias y fuerzas de seguridad. La nueva operación ha desmantelado una red en la que ya se ha conseguido identificar el método de las peligrosas transacciones que están poniendo en juego la salud de muchos jóvenes. El perfil del consumidor habitual no es el de un toxicómano enganchado a la heroína sino el de adolescentes muy jóvenes que buscan experimentar nuevas sensaciones. Etiquetada como la droga de los pobres, debido a su bajo coste y fácil acceso, ha suscitado preocupación entre las autoridades y expertos en salud pública por sus potenciales riesgos para la salud y su rápida propagación en adolescentes.

El Rivotril se receta en muchos casos a adictos para ayudarlos en su proceso de reinserción, pero en este caso las transacciones involucran a personas de edades diversas, desde adolescentes de poco más de 12 años a mayores de edad. Se han registrado casos en los que toxicómanos habituales cambian las pastillas que han conseguido legalmente tras la preceptiva receta médica a cambio de una dosis para ellos o de dinero. Su bajo costo, inferior a tres euros, lo convierte en una opción fácilmente accesible para los jóvenes. Sin embargo, sus efectos pueden volverse incontrolables y peligrosos, afectando incluso al corazón. Tiene efectos inmediatos a nivel neuronal y aunque al principio genera una sensación de euforia, posteriormente provoca una profunda relajación y bienestar.

El subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, ha destacado la gravedad de la presunta implicación de los facultativos. «O que máis nos preocupa, dende o máximo respecto á presunción de inocencia, é a presunta impicación nesta rede de médicos de Sergas de Cangas e de Vigo así como de varias farmacias». «A investigación está sendo dirixida polo Xulgado de Instrución número 2 de Cangas e reiteramos o noso compromiso co respecto as operacións policiais e xudiciais». ha apuntado Losada. «Queremos felicitar á Guardia Civil pola súa labor nesta operación que segue aberta», concluyó. Losada confirmó que, a día de hoy y, tras la operación de este jueves en Cangas relacionada con el tráfico de medicamentos y drogas, son ya 16 las personas investigadas además del detenido esta mañana en O Morrazo. 

El conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, ha dicho que no tiene ninguna información sobre la operación y ha mostrado la disposición de su departamento a colaborar.