La rama de Nigrán pasa de 17 imputados a solo dos procesados
04 sep 2018 . Actualizado a las 13:54 h.La titular del Juzgado de Instrucción número 7 de Vigo cerró ayer la investigación de la pieza separada de Nigrán, una ramificación de la operación Patos, la supuesta trama sobre tráfico de influencias en la contratación de obra pública de varios concellos del sur de la provincia en el 2013. La investigación se salda con dos exconcejales encausados para los que la Fiscalía pidió que sean juzgados por un jurado popular. Se trata de los exediles de Nigrán José Álvarez Valverde, el único cargo que dimitió tras ser implicado en la trama, y Vicente Costas Pumar, un exconcejal y administrador de Coysagran SL, que ya no era cargo público cuando estalló el caso. La Fiscalía les atribuye un delito de tráfico de influencias en la concesión de varias obras en dicho municipio. La jueza tendrá que decidir ahora si abre juicio contra ambos exconcejales y estos deban comparecer ante un tribunal popular para ser juzgados.
La magistrada celebró ayer la comparecencia del artículo 30 de la ley del jurado. En dicho acto, la Fiscalía solicitó la apertura de un juicio oral para Valverde y Costas por tráfico de influencias. Por las partes, no hubo oposición a dicha petición de que nueve ciudadanos de un tribunal popular los juzgue.
Dos sobreseimientos
La Fiscalía también solicitó el sobreseimiento para las otras dos personas investigadas que quedaban. Se trata de los empresarios Silvano J.O., que coloca alumbrado, y Andrés G.B., que hace excavaciones. Ambos quedaron libres de todos los cargos.
De los 17 investigados, incluido el entonces alcalde de Nigrán, Alberto Valverde, solo han quedado procesados los dos exconcejales. El juzgado tendrá ahora que notificar su decisión sobre la apertura de juicio oral. El concejal de Vías y Obras de Nigrán, José Valverde, apodado Cacheiro, fue uno de los cinco detenidos en la causa principal en febrero del 2014, junto al supuesto cerebro de la trama, Enrique Alonso Pais, y otros empresarios. Tuvo que dimitir del cargo a los pocos días de ser detenido y estar implicado en la trama. Valverde, que era el único cargo político investigado al inicio de la operación, insistió en su inocencia pero su propio partido le indicó la puerta de salida.
En cuanto al otro exconcejal, Costas, este actuaba como administrador de la constructora Coysagran y la Fiscalía le siguió la pista en relación con su supuesta intervención y las adjudicaciones efectuadas a su empresa en las obras de Porto do Molle, plaza de A Carrasca, el pintado y señalización vial y la colocación de aceras en Praia América.
La trama de Nigrán se desgajó de la principal de Vigo, lo mismo que otras investigaciones similares en Pontevedra, Ponteareas, Santiago y Ourense. En todas ellas, el nexo común es que uno o más constructores y contratistas públicos tenían hilo directo con altos cargos de la Administración, concellos, Xunta, consorcios o diputación. La red, según dedujeron los investigadores, colaboraba para amañar concursos públicos con la ayuda de empresarios amigos.