Desalojado un edificio okupa en Ponteareas bajo un fuerte dispositivo de seguridad
PONTEAREAS
La Guardia Civil movilizó numerosas patrullas. Uno de los implicados fue trasladado al cuartel por un supuesto delito de alteración del orden público
13 mar 2025 . Actualizado a las 14:46 h.De cero a cien en dos minutos. La céntrica calle Reveriano Soutullo de Ponteareas se convirtió esta mañana en el hervidero del municipio al desembarcar media docena de patrullas de la Guardia Civil apoyados por el equipo de la Usecic. Los agentes entraron en uno de los edificios de la calle a las nueve y media de la mañana y, sin ningún tipo de incidencia, fueron llamando a todas las puertas mientras dos custodiaban la puerta de acceso, la única sin número en la calle porque parecía como arrancado el número 9. Se trata del edificio en el que se registró un incendio intencionado hace unas semanas y por el que la Guardia Civil detuvo a una mujer de 54 años que esta semana ingresó en prisión.
«Por fin, por fin se hace algo». Fue la expresión que más se repitió en cuanto llegaron los guardias entre los vecinos que, móvil en mano, grababan el operativo. Según algunos de los residentes en la zona, los okupas llevaban ya más de medio año en el inmueble «y hasta habían roto la pared principal para poder utilizar los seis pisos, tanto los que dan a la calle como los que dan al patio». Desde la calle se escucharon golpes que, posiblemente fueran los de echar la puerta abajo ya que los agentes emplearon una maza y también llevaban escudos.
Los primeros en salir abandonaron el edificio media hora después. A las diez salieron los efectivos de la USECIC y aún seguían dentro varios guardias con los okupas. Un joven de unos 25 años fue el primero en salir y hasta saludó a un cámara que grababa la secuencia. Los demás fueron saliendo a cuentagotas, siempre escoltados. La mayoría jóvenes varones con una mochila en la que llevaban sus pertenencias y otros con lo puesto. Sobre las diez y cuarto salieron dos mujeres cargadas de bolsas e incluso un hatillo de ropas a las que también acompañaron los agentes hasta el final de la calle.
Al salir, ninguno hizo declaraciones pero tampoco hubo incidentes en la calle, desde donde los vecinos muestran cómo cuelga el cable de un enganche ilegal de luz al alumbrado público. Al parecer los bomberos ya acudieron varias veces en los últimos meses para quitar otros enganches. Según los residentes, tampoco tenían agua en ninguno de los pisos. Se trata de un edificio acabado pero que, según los vecinos, nunca se llegó a vender.
Detenido
El operativo de desalojo en Ponteareas ha movilizado también a los bomberos ya que, al parecer, los guardias vieron cómo al darse cuenta de su entrada en el inmueble, alguno de los desalojados tiró una bolsita desde la azotea del dúplex. Varios bomberos accedieron al techo del inmueble contiguo para intentar localizarla. El operativo continuó después a unos 300 metros, en las oficinas del departamento de Servicios Sociales. Los agentes se desplazaron de inmediato ante la llamada de un supueto caso de alteración del orden público y llevaron trasladado al cuarte a uno de los jóvenes que antes había sido desalojado. Antes de las doce del mediodía, un servicio de cerrajería cambio la puerta del edificio y colocó una blindada.