Absuelta de sustracción de menores una viguesa que huyó de casa con dos hijas

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M.MORALEJO

Se refugió 10 días en una casa de acogida pero la Audiencia Provincial concluye que no pretendía alargar la situación sino que detrás había una crisis de pareja y archiva el caso

04 nov 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Un marido denunció a su mujer por sustracción de menores porque esta abandonó el hogar con sus dos hijas para refugiarse en el Centro de Emergencia para Mujeres en situación de Violencia de Género de Vigo durante diez días. El Juzgado de Instrucción número 5 de Vigo archivó la denuncia porque la mujer no pretendía privar al padre de las menores. La quinta sección de la Audiencia de Pontevedra, con sede en Vigo, avala ese dictamen. Se trataría más bien de una crisis de pareja.

La sala, en una sentencia del 18 de junio del 2025, avala el sobreseimiento provisional de la denuncia por no haber delito. Ve probado que la denunciada se ausentó del domicilio familiar con sus dos hijas menores el 5 de noviembre del 2024 y que regresó al hogar al cabo de 10 días. En ese período, ella permaneció en el Centro de Emergencia para Mujeres en situación de Violencia de Genero. En todos esos días tuvo en todo momento informado a su marido y denunciante del estado de salud de las menores vía WhatsApp, no constando que las niñas hayan sufrido perjuicio alguno. La esposa regresó al domicilio por entender que las menores estarían mejor que en la casa de acogida. Los hechos se desarrollaron en el marco de una «crisis de pareja». La sala concluye: «Pues bien, ante ello y dadas las circunstancias que rodearon los hechos, no permiten sostener una acusación seria» al no ver indicios de delito.

El marido se quejaba de que no había ninguna prueba de que ella fuese una maltratada. Pero el tribunal le recuerda que todo empezó cuando la esposa se despertó en medio de la noche y vio a su marido pegándola. Él se justificó diciendo que tenía «terrores nocturnos» y que eran «bromas», pero a la noche siguiente volvió a actuar.

Ella se marchó de casa y se negó a regresar. Le preguntaba a su marido por wasap: «¿Cómo diablos puedo volver a casa con eso? Ahora creo que todas esas bromas o fuertes golpes accidentales que me has dado, eran a propósito. ¿Cómo puede alguien golpear a alguien tantas veces por accidente?». El hombre le pedía que volviese con las hijas para que ellas tuviesen una familia. La mujer le replicó: «Eso no era una familia. Era un ser humano que nunca había conocido arruinando su vida y la de todos los que lo rodeaban. ¡Yo te quería! Pero me he despedido de ti hace mucho tiempo. Creo que pensabas que era una mujer más débil de lo que soy».

Tras leer los wasaps, el tribunal no ve voluntad de permanencia en la fuga ni le consta la privación de la relación del padre con los menores «más allá de la interinidad que conlleva una crisis familiar». Recuerda que la mujer estaba en contacto con el marido y le enviaba wasaps disculpándose por la tardanza en contactar: «Tengo dos hijas aquí, estoy tratando de cuidarlas lo mejor que puedo durante este momento triste».