Nueve claves para construir un «opozulo» y salir de él con éxito

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Si pones rumbo a una oposición pasarás muchas horas haciendo lo mismo: estudiar. Dos preparadores de academia te dan las claves para que tu escritorio sea eficiente y cómodo. Y si buscas inspiración, date una vuelta por Instagram, el #opozulo es tendencia

10 nov 2021 . Actualizado a las 09:14 h.

1. Buena iluminación

Lo primero que recomienda Alejandro, profesor en Preparadores Oposiciones, es tener una buena iluminación: «Luz natural en la sala, pero también luz artificial en el propio escritorio». En el caso de la natural, lo ideal es que esta no sea directa, al contrario de la artificial, que debe estar dirigida al lugar de estudio. Hay que tener en cuenta que una jornada de oposición puede ser de ocho horas o más, por lo que es esencial prevenir el cansancio ocular y otros problemas a causa de la luz, como dolores de cabeza.

 2. Siempre el mismo lugar

«Si es posible, el espacio de estudio tiene que ser siempre el mismo, es un espacio de trabajo y se tiene que dedicar a eso», recomienda Alejandro. Olvídate de llevar los apuntes a la mesa de la cocina, del salón... llévalos a la mesa de oposiciones. Y si puedes tener un escritorio amplio, mejor, aunque estas condiciones dependen de las posibilidades de cada uno. Si no puedes dedicar un lugar al estudio, al menos intenta ir siempre al mismo. Eso sí, olvídate de estar ahí en tus momentos de descanso, tampoco favorece.

3. Calendario de organización

Roberto, de la academia Premir, destaca la importancia de tener un calendario de organización en el que repartir los temas a estudiar y las tareas. Aunque planifiques semanalmente, recuerda que los objetivos deben ser diarios. «Lo mejor es que el calendario no esté visible permanentemente para que el estudiante se centre en los objetivos del día y no se agobie pensando en todo lo que tendrá que hacer durante la semana, hay que ir por microobjetivos para llegar a un buen resultado», explica.

 4. Ordenador portátil

El ordenador es una herramienta imprescindible para cualquier opositor, hay que tenerlo para buscar información, consultar apuntes o incluso asistir a alguna clase de academia que se imparta «online». Sin embargo, cuenta Alejandro, no es recomendable tenerlo siempre encima de la mesa. En su momento es una ayuda, pero cuando hay que centrarse en el papel puede suponer una distracción, igual que el teléfono móvil.

5. Mesa despejada

Aquí lo que se lleva es el minimalismo, encima de la mesa hay que tener únicamente lo que necesitas, nada de dejar durante días las tazas de café en el escritorio. Y nada de tener el bloque de apuntes y libros al lado: «Lo único que hay que tener es el material imprescindible para esa jornada de estudio, solo los temas o apuntes que vayas a tratar. Si tienes todo junto es más probable que te agobies pensando en todo lo que te falta, en lugar de pensar en esos apuntes», explica Alejandro.

6. Períodos de descanso

Tan importante como el estudio es el descanso, es esencial para poder rendir en las largas jornadas de trabajo y tener un mejor ánimo y motivación. No es recomendable estudiar todos los días: «Es muy importante tener un tiempo de descanso, aunque si no se hacen las tareas que corresponden hay que castigarse y renunciar a ese descanso para hacerlas». Así que si te sientes sin ánimo, piensa que la recompensa puede ser unos días sin tocar los libros.

7. Calcular probabilidades

El tiempo y el espacio hay que tenerlo controlado, pero en una prueba tan dura como una oposición, también es importante ser lo más eficiente posible. Para esto Roberto tiene un truco, hacer una hoja de cálculo con los temas estudiados y el porcentaje de probabilidad de que aparezca en el examen alguno de ellos. De esta forma, sabemos si el porcentaje de que toque uno estudiado aumenta poco o mucho al añadir uno más y si vale la pena invertir esfuerzo en estudiarlo.

8. Contacto y apoyo

Estudiar es un proceso solitario, por eso Alejandro insiste en que es importante relacionarse con otros opositores: «La familia te puede apoyar y escuchar, pero no te van a entender igual que otro estudiante que está viviendo lo mismo». Y no solo compartir quejas o dificultades, esta relación es útil para ayudarse unos a otros, intercambiando apuntes o con consejos. Eso sí, en los tiempos de descanso está prohibido hablar de oposiciones, cambiad de tema.

9. Utilizar subrayadores

La buena memoria es fundamental para estas pruebas y hay algunas técnicas que ayudan bastante. En tu mesa no pueden faltar los subrayadores: «Con dos o tres es suficiente para destacar palabras clave y favorecer la memoria fotográfica, si utilizamos muchos colores también habrá que memorizar qué significa cada uno», cuenta Alejandro. Aunque hay otras estrategias que pueden funcionar, como escribir muchas veces los temas, o decir la lección en voz alta. Elige la que mejor se adapte a ti.