Mónica Alba, notaria: «Cada vez viene más gente a adelantarles la herencia a sus hijos para que se puedan comprar un piso»
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Ante la dificultad para independizarse, los pactos de mejora y las donaciones han incrementado con fuerza en los últimos años. En Galicia, estas están exentas de pago hasta en un millón de euros. «No se puede saber si esto seguirá así siempre», aclara la experta
10 oct 2025 . Actualizado a las 08:09 h.Las donaciones de viviendas de padres a hijos en España se han visto incrementadas en un 67 % en los últimos 7 años, una subida que hasta el momento se mantiene con fuerza en el primer semestre de 2025, con un total de 202.923 inmuebles donados. Esta noticia llega en pleno debate sobre la dificultad que tienen los jóvenes para independizarse. Mónica Alba, notaria en Vigo, ofrece su visión e intenta responder a por qué esta práctica está en alza estos últimos años.
—¿Por qué se ha producido este incremento?
—En Galicia existe algo llamado pacto de mejora. Estas son donaciones en vida que hace un padre a su hijo y que están exentas de pago en el primer millón de euros, pueden ser económicas, de inmuebles o incluso de acciones. Los padres van adelantando dinero a los hijos para sobre todo comprar las viviendas. Y les ayudan por parte de mejora porque están exentos fiscalmente.
—¿Cada vez va más gente a la notaría para poder adelantarle el dinero de la herencia a los hijos para conseguir una vivienda?
—Sí, es verdad. Este año, sobre todo, ha habido un incremento en los pactos de mejora de dinero. Aunque la palabra mejora no es muy exacta jurídicamente en este caso, porque da a pensar a los padres que mejoran a un hijo respecto al otro. Y no es así, sino que los pueden mejorar a todos al mismo tiempo, los están ayudando, entonces, da un poquito de lugar a confusión. Incluso ahora hay muchos casos de mejoras a hijos únicos y se siguen llamando así y no estás mejorando respecto de nadie. Aunque sea el único heredero, le vas adelantando dinero para comprar el piso para vivir.
—¿Y de los actos notariales que haces, dirías que estos suponen la mayor parte hoy en día?
—No, pero es un porcentaje muy elevado. Pueden suponer una cuarta parte, o así.
—¿Y cuál es la diferencia entre este traspaso y una herencia propia?
—La donación y el pacto de mejora se hace en vida, y la herencia cuando falleces. A nivel fiscal es igual, porque la exención de pago es en ambas de hasta un millón de euros. En una donación corriente debes asegurarte como notario que el donante se reserva lo necesario para vivir bien después de hacer la donación. En estos pactos de mejora que solo existen en Galicia esto no está regulado y lo que se suele hacer en estos casos, es constatar en las escrituras que el hijo o la persona mejorada conoce la situación patrimonial de los padres, es decir, que saben que estos no le están dando todo lo que tienen y que se quedan una parte para poder vivir bien. Además, en las mejoras de vivienda, si lo quieren, los padres pueden guardarse el usufructo de esta —la potestad para vivir en ella o alquilarla—, aunque esto es algo opcional.
—¿Qué ventaja tienen los pactos de mejora respecto de la herencia?
—No sabemos cuándo van a cambiar las legislaciones. Antes, la exención era de 125.000 euros y posteriormente, subió a 400.000, hasta llegar al millón en el que estamos ahora desde hace bastantes años. Pero esto es algo que en cualquier momento puede variar, así que mucha gente piensa «adelanto esto para mis hijos, y así me aseguro que no se lo lleva el Estado, porque no sé si, llegado el momento de recoger la herencia, esta exención va a seguir siendo de un millón de euros. Ese es el motivo fundamental.
—¿Cuál es el objeto de polémica o la mayor disputa de las familias en las herencias?
—Normalmente, que la gente se ponga de acuerdo en lo que se llevan al separar la herencia. Por suerte, en la notaría pocas veces tenemos que hacer esa separación nosotros. Las familias suelen venir ya de acuerdo con el reparto, si no, deben acudir al juzgado.
—¿Cuál suele ser la media de pago en los pactos de mejora de dinero?
—Diría que está entre los 15.000 y los 30.000 euros.
—¿Esta donación puede suponer algún riesgo legal para el que la recibe? ¿Puede tener alguna consecuencia?
—No, la consecuencia legal es que ingresas en tu patrimonio, o bien una cantidad de dinero, o bien unas acciones o unos inmuebles que tendrás que declarar fiscalmente después. Depende de los límites que tengas con el patrimonio o ganancia patrimonial, nada más. Es una aplicación fiscal. Pero problemas legales, no.
—¿Qué perfil de familias ves que hacen este traspaso? ¿Hay algún patrón?
—No, hay de todo. No hace falta tener mucho patrimonio. A la edad de los veintitantos años o casi 30 que la gente empieza a independizarse, ahí es cuando comienzan a hacerse los pactos de mejora.
—Además de las donaciones de padres, ¿has notado un incremento en el número de abuelos que deciden hacer una donación de vivienda a los nietos directamente?
—He visto muy pocas. Para ser mejorado necesitas ser mayor de edad, entonces, los abuelos deberían hacer la donación a nietos de más de 18 años. Llegar a ese punto y tener la cabeza en las condiciones requeridas para hacer el pacto de mejora no es fácil. Imagina si tienes un nieto a los 70, tendrías que esperar a tener 88 para poder realizarla. En todos los actos notariales tienes que ver si la persona que lo va a hacer tiene la capacidad.
—¿Qué cambios debería haber en España para que hubiese un cambio de tendencia respecto a las donaciones?
—No lo sé, la verdad, porque es una cosa positiva, que hace que se mueva la economía y que la gente joven emprenda, ya las había antes también. Pero como no puedes vincularte al futuro, no puedes asegurarle a nadie que no vaya a cambiar la legislación y que vas a estar exento de pagar hasta un millón de euros en las donaciones y las herencias por cónyuge durante toda la vida. Es imposible predecirlo. La gente se mueve por eso.
—Desde el 2017 se han hecho más de once millones de actos notariales aquí en España. ¿Hay alguno, aparte de este, que tenga lugar con más frecuencia ahora que antes?
—Las separaciones de bienes. Antes la gente se casaba en gananciales, pero ahora la mayoría de parejas, antes o después de casarse, incluso parejas de hecho, van a hacer separación de bienes. Aumentó mucho también todo lo relacionado con la documentación relativa a las personas inmigrantes. Las juras o promesas de nacionalidad, que son el último acto que tienen que hacer después de adquirir la nacionalidad por residencia. Actas de manifestaciones para que los hijos, si están fuera los padres, puedan ir al colegio. Todos los actos del estado civil relacionados con la inmigración.
—En el 2024 también hubo un incremento del 26% de los matrimonios ante notarios. ¿Tú en la notaría no lo has notado?
— Sí, perdona, eso también ha aumentado. Ahora se hace raro que no pase una semana en la que no case a nadie. Este método de casamiento resulta mucho más ágil. Antes de hacer el acto, tienes que hacer un expediente matrimonial. Lo tienes que hacer, aunque te cases en la notaría, en el juzgado o en la iglesia. Ese expediente matrimonial sirve para ver que no hay matrimonios de conveniencia. Implica un procedimiento en el que separas a los futuros cónyuges, y les haces un test un poco largo preguntándoles cosas acerca del otro, como en las películas, básicamente. Ese expediente no se hace en tu notaría de siempre, es un procedimiento de turno notarial.
—¿Qué significa turno notarial?
—Si yo, por ejemplo, tengo una pareja de amigos de A Coruña que se quieren casar en mi notaría en Vigo, no pueden venir directamente para hacer el expediente matrimonial, deben acudir al colegio notarial de su lugar de residencia y pedir que les asignen por turno un notario de allí para que les haga el expediente. Así, no hay influencia en el hecho de que el notario conozca a los cónyuges. Una vez realizado ese procedimiento, ya pueden casarse donde quieran.