Los próximos doce meses no serán fáciles, con una leve recesión en Europa y un crecimiento moderado de la economía mundial, las perspectivas no invitan al optimismo
El ministro de Finanzas de Brasil, Guido Mantega, lanzó la más clara advertencia a las economías avanzadas de que ya «no pueden manejar por sí solas los riesgos de la estabilidad global».