Eva y Emilio son dos de los inquilinos de unos cuartos que rentan personas sin apenas recursos. Dicen que tener al fin un techo está haciendo que sus vidas se enderecen
De Cuntis a Cambados pasando por Caldas, Marín, Poio, A Estrada o Rodeiro hubo máscaras en un domingo en el que resucitaron muertos y se celebraron hasta elecciones americanas