Algunos funcionarios extranjeros han asegurado que tras sufrir estos ataques en sus casas desarrollaron síntomas como mareos, náuseas, jaquecas, problemas de equilibrio y un prolongado zumbido en los oídos
Ha decidido «empezar el proceso de dejar claro al régimen (de Raúl Castro) que hay hitos muy específicos que van a tener que cumplir si quieren continuar con este tipo de relación»