La macroprisión asturiana figura entre las 19 cárceles más violentas del país. El sindicato Acaip asegura que la mayoría de las agresiones sufridas por los funcionarios se deben a ataques «al mediar en peleas entre reclusos»
La tibieza del CSD le permite retomar su influencia al salir de la cárcel, con un sustituto de su confianza y el anuncio de la nueva directiva aún pendiente