El turismo rural rechaza estar sometido al chantaje

María Cuadrado Fernández
M. CUADRADO VIVEIRO/ LA VOZ

A MARIÑA

Aturmar niega presiones de clientes que exigen estancias gratis a cambio de opiniones positivas del negocio en la Red

04 oct 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Las opiniones de los usuarios pueden estropear o mejorar la imagen de una casa de turismo rural. Son un arma de doble filo y algunos empresarios del sector consideran que pueden llevar al chantaje en portales y redes sociales. No obstante, el presidente de la Asociación de Turismo Rural de A Mariña Lucense (Aturmar) asegura que el chantaje que denuncian algunos de los profesionales del sector no es un mal general «sino un tema puntual». Manuel Vicente es categórico a la hora de negar presiones a miembros del colectivo para conseguir estancias gratis a cambio de evitar opiniones negativas sobre su establecimiento en la Red: «En nuestros locales no hemos tenido amenazas de este tipo», indica, aunque confiesa que, cuando comenzó a extenderse esta preocupación por la Red, los socios de Aturmar abordaron el asunto. Sin ánimo de polemizar, Vicente reconoce que muchos empresarios creen que para el negocio es mejor recibir un mayor número de opiniones: «Las opiniones pueden estar bien o mal, pero hay que trabajar honestamente y no comprar opiniones. Si nunca has fomentado el incremento progresivo de opiniones, no tienes problema».

Desde Aturmar están convencidos de que un buen servicio es la mejor carta de presentación, aunque siempre hay excepciones. Son conscientes del riesgo que entraña dejar libertad al usuario para verter en la Red su valoración del servicio, si bien el presidente de Aturmar indica que hay negocios que optan por no activar los comentarios, privando también así al establecimiento de las críticas positivas.