Perros sueltos «sin educar» mataron en un mes a 4 patos del estanque del parque Pernas Peón de Viveiro

A MARIÑA

La persona que los cuida, alimenta y desparasita, Mar Taladrid, empleada municipal, insta a los propietarios de los canes a enseñarles a respetar a otros animales
20 jun 2025 . Actualizado a las 17:51 h.Perros sueltos «sin educar» mataron en el último mes cuatro patos del estanque del parque Pernas Peón de Viveiro. Mar Taladrid, trabajadora del equipo de jardinería del Concello de Viveiro y persona que se ocupa del cuidado, la alimentación o la desparasitación de estas aves, denuncia en sus redes sociales unos hechos que, en su opinión, tienen un claro responsable: los propietarios de los perros. «Quiero dejar claro que no tengo nada en contra de los animales. Todo lo contrario. Yo tengo una perra y varios gatos, pero hay que educarlos», apunta Taladrid, que es presidenta del colectivo de Colonias Rueiras, que vela por el bienestar de los gatos callejeros del municipio del Landro.
Señala que los patos tienen varios depredadores naturales, como la garduña o la gineta, pero la acción de los humanos es mucho «peor». Indica que algunos dueños de perros los dejan correr libres sin control, sin enseñarles formas de respetar a otros animales e incluso a los humanos. «Y mi perro no hace nada hasta que lo hace, porque no deja de ser un animal», reflexiona. Algo que puede tener consecuencias en espacios naturales como el estanque del parque. Taladrid precisa que esta primavera no han nacido patos porque «las patas están estresadas» debido al ajetreo que les acarrean los perros, y varios machos han muerto. «Este año no hay crías», lamenta, y anima a tomar conciencia.
En esa línea, hace un llamamiento a los padres y madres para que enseñen a los niños a respetar a los patos. «Que no corran detrás de ellos. Los patos tienen las patas muy cortas y esas situaciones los estresan», dice. En cuanto a alimentarlos, resalta que en las inmediaciones del estanque hay colocados varios tableros en los que se informa de que se les pueden dar zanahorias troceadas, guisantes, lechugas o algún tipo de cereal, entre otros. Uno de los animales fue atacado en una de las casetas del estanque, donde quedó malherido. Un responsable de Protección Civil tuvo que vestir un bañador y meterse dentro para conseguir sacarlo. Fue necesario practicarle la eutanasia. «Hay que respetar a los animales y sus espacios», concluye Taladrid, que resalta que durante el Resurrection Fest «nunca ha habido ningún problema». Aunque la acampada principal se emplaza en el parque Pernas Peón, según destaca, ningún pato ha sufrido nunca daños durante esas fechas. Al igual que un gato que vive en el entorno.