




Densas columnas de humo de varios fuegos cubren el noroeste de España y el norte de Portugal
20 ago 2025 . Actualizado a las 18:16 h.Los satélites de observación terrestre de la Agencia Espacial Europea muestran la propagación de los incendios forestales que llevan semanas afectando a Galicia y sirven también de apoyo a los equipos de emergencia que combaten las llamas en tierra. Las imágenes revelan la magnitud de la crisis, con densas columnas de humo procedentes de varios fuegos que se extienden por extensas zonas del noroeste de España y el norte de Portugal. Con estas, los medios que trabajan sobre el terreno pueden coordinar su respuesta y planificar riesgos futuros.
La imagen fue capturada por la misión Copernicus Sentinel-3 el 17 de agosto. Con una amplia vista de Francia, España y Portugal, muestra el humo que se eleva desde los incendios en la parte norte de la península ibérica.
Explican desde la Agencia Espacial Europea que estas densas columnas de humo se desplazan hacia el norte y el este con los vientos predominantes, fusionándose con sistemas nubosos sobre el Atlántico y cubriendo amplias zonas del Golfo de Vizcaya. Parte de este humo en dirección norte también se está dispersando sobre la costa mediterránea española.
En la provincia de Ourense siguen activos siete incendios forestales que afectan a 67.520 hectáreas. El fuego más preocupante sigue siendo el de Larouco, que lleva siete días ardiendo y ya afecta a más de 20.000 hectáreas de territorio. Le sigue en extensión el incendio de Chandrexa de Queixa, el primero que comenzó en esta ola incendiaria el pasado 8 de agosto y que afecta a una superficie de unas 18.000 hectáreas. El fuego de Oímbra ha quemado ya unas 15.000 hectáreas, mientras que las llamas que empezaron en A Mezquita el martes 12 de agosto ya han arrasado hasta 10.000 hectáreas. En Carballeda de Avia el monte empezó a arder el pasado viernes, un fuego que se unió a otro iniciado en Beade y que ya afecta a 4.000 hectáreas. Varios frentes de fuego arrancaron en diferentes parroquias de Vilardevós, pero solo uno permanece activo esta mañana, en Moialde y afecta a unas 500 hectáreas. El último fuego activo es el de Carballeda de Valdeorras, que ha quemado ya una veintena de hectáreas.