Pierde el carné un conductor de edad avanzada que circuló diez kilómetros en dirección contraria por la A-8

A MARIÑA

A-8 en el tramo Barreiros-Ribadeo, en imagen de archivo
A-8 en el tramo Barreiros-Ribadeo, en imagen de archivo PEPA LOSADA

La Audiencia ovetense entiende que fue imprudente al ignorar los avisos que le hicieron los usuarios de la vía

24 jun 2025 . Actualizado a las 16:45 h.

La Audiencia Provincial de Oviedo ha desestimado el recurso interpuesto por un hombre condenado por conducción temeraria, y confirma así la sentencia del Juzgado de lo Penal 2 de Avilés que le impone una pena de seis meses de prisión y la pérdida del carné durante dos años y medio. El conductor, de edad avanzada, fue detectado circulando en dirección contraria a lo largo de unos diez kilómetros de la Autovía del Cantábrico (A-8).

Según los hechos probados, el incidente ocurrió el 9 de julio del 2022, a las 14.30 horas. El condenado se incorporó a la A-8 en la glorieta situada en el punto kilométrico 495,600 (salida hacia Tapia de Casariego y La Roda), y condujo en dirección contraria hasta la salida situada en el hito 504 (salida hacia Figueras-Castropol), momento en el que fue interceptado por la Guardia Civil.

«Durante el recorrido se cruzó con varios vehículos y continuó la marcha a pesar de que algunos conductores le hicieron señales luminosas y acústicas para que se detuviera, llegando a atravesar un túnel de 245 metros de longitud (Túnel de Foristo) y pasando junto a otro enlace de incorporación a la autovía (salida hacia Barres, Vegadeo y Lugo), creando de esta forma un peligro concreto para la vida de los usuarios de la vía», recoge la sentencia.

La defensa pedía la absolución y alegaba en su recurso un error en la valoración de la prueba, argumentando que no se había acreditado suficientemente que el procesado fuese el conductor del vehículo. Además, resaltaba que «no existió intención, ni siquiera figurada, de causar daño a otros conductores, tratándose de una persona muy mayor y torpe, siendo la conducta del acusado fruto de un despiste».

La Audiencia considera que hay pruebas suficientes para enervar la presunción de inocencia, ya que el conductor reconoció a la Guardia Civil los hechos y el testimonio de los agentes coincide con los de los numerosos conductores que alertaron en aquel momento de la marcha de un Citröen Saxo granate en dirección contraria. Entiende también que el delito de conducción temeraria se ajusta a este caso, al ignorar el procesado, de forma «imprudente» y sabiendo lo que hacía, no solo las señales de la autovía sino durante varios kilómetros los avisos que le hicieron los otros usuarios para que se detuviese.