«Llegan cada vez más veleros con gente que se toma un año sabático o hace travesías»

VIVEIRO

El puerto deportivo de Viveiro acoge a muchos franceses, holandeses o nórdicos
25 may 2025 . Actualizado a las 11:03 h.En su travesía por el Cantábrico o hacia el Atlántico primero y el Mediterráneo después, bordeando la península ibérica, el puerto deportivo de Viveiro es parada de referencia para cientos de embarcaciones de recreo procedentes de Francia, Países Bajos y Alemania, principalmente, pero también de países nórdicos como Suecia, Finlandia o Dinamarca. «Llegan muchos veleros con gente que se toma un año sabático o hace travesías largas. También hay muchas personas jubiladas», relata la responsable de administración de Marina Vivero, la empresa concesionaria de la gestión del puerto, cuya titularidad corresponde a Portos de Galicia, Ana Eiriz Seoane.
De los 235 puntos de amarre con que cuenta el muelle, que entró en funcionamiento hace algo menos de tres décadas, entrados los años noventa, en torno a un 75% (más de 160) permanecen ocupados durante todo el año. Buena parte son pequeños veleros de gente que vive en la zona, aunque también hay extranjeros que tienen su barco en Viveiro. Además hay un buen número de marineros o marinos jubilados que tienen pequeñas embarcaciones con las que salen al mar de pesca. El 25% de los amarres son para buques en tránsito.
«Somos un puerto muy valorado porque, al tener varadero, nuestros técnicos solucionan cualquier problema que surja en la navegación», Ana Eiriz Seoane, responsable de administración de Marina Viveiro
Según Eiriz Seoane, los navegantes aprecian especialmente que el puerto viveirense disponga de un varadero que está operativo los 365 días del año las 24 horas. Sus técnicos resuelven cualquier incidencia que pueda surgir en la navegación: desde averías y problemas mecánicos, pasando por daños en los cascos de fibra o en la pintura. «Somos ocho trabajadores y ofrecemos atención personalizada en todo momento», resalta una profesional que considera que la pandemia del coronavirus incentivó «todo lo que tiene que ver con las actividades al aire libre». «Y cada vez hay más gente joven interesada en el mundo de la náutica», cuenta.
Precios variados
El precio anual del atraque más económico de una embarcación de hasta 6 metros de eslora es de 1.200 euros, mientras que para una de 20 alcanza 7.447 euros.
La llegada de catamaranes es menor que la de otros años debido a su evolución tecnológica
El mayor trasiego de embarcaciones en el puerto deportivo de Viveiro comienza entre los meses de abril y mayo, y se prolonga hasta bien entrado el otoño. En base a los datos registrados en lo que va del 2025, la llegada de catamaranes está siendo ligeramente inferior a la de años anteriores, según detalla Ana Eiriz, quien precisa que esta circunstancia tiene su origen en que este tipo de embarcaciones, que en su mayoría proceden de Francia, tienen ahora «más tiempo de autonomía», por lo que puede realizar recorridos más largos. «Por un tema de garantías, los catamaranes pueden esperar ahora más tiempo para hacer las revisiones, por lo que el primer puerto en el que hacen escala es en el de A Coruña», precisa. «La mayor parte de los chárter o catamaranes van hacia el Mediterráneo, por lo que quienes vienen en ellos son personas contratadas para llevar la embarcación hasta un puerto o un lugar desde el que el propietario iniciará una travesía», precisa.
«Passport escales»
En cuanto a los veleros, muchos proceden de puertos franceses como Le Sables D'Olonne, Lorient o Sète, entre otros. «En los puertos franceses se incentiva mucho la navegación temporal. Los puertos base regalan a los navegantes estancias en otros puertos», comenta la trabajadora del puerto deportivo viveirense, quien precisa que estos pasajeros se mueven con el denominado «Passport escales», remata.