El Colectivo Ecoloxista de O Salnés entregó esta semana en los registros de varios concellos de O Salnés escritos pidiendo que se analizara la presencia de la toxina microcistina en sus redes de abastecimiento de agua potable. Esta petición se ha entregado en los ayuntamientos de Ribadumia, Cambados, Sanxenxo, O Grove, Meaño y Vilanova.
A estos organismos locales pide el CES que, en el caso de que hayan hecho alguna analítica de esta toxina, que hagan públicos los resultados. Si, por el contrario, no lo han previsto, que se realicen las analíticas y se tomen las medidas pertinentes para minimizar los problemas de salud pública que derivarían de la presencia de la cianobacteria. Los ecologistas entienden que tanto la estrategia a seguir como los resultados de las analíticas deben ser puestos en conocimiento de los ciudadanos.
El colectivo recuerda que en el embalse de Caldas, en el río Umia, se dan de forma repetida casos de explosión de la cianobacteria microcistis, que produce una toxina orgánica, la microcistina. Aguas abajo del río Umia, a su paso por Pontearnelas, se encuentra una toma de agua que abastece parcialmente a varios municipios de la comarca. Los ecologistas temen que la explosión de microcistis podría expandirse por el Umia, afectando a Pontearnelas y creando, por consiguiente, un problema de salud pública que podría agravarse por la escasez de lluvias y la poca renovación de las aguas.