Soberbios chuletones de buey en el templo de la carne

carlos crespo VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MONICA IRAGO

O Ruedo se halla en plenas jornadas de chuletón

27 feb 2020 . Actualizado a las 21:39 h.

El templo arousano de las carnes está de enhorabuena. Al asador vilagarciano han llegado, tras pasar 72 días madurando en las cámaras de Gallecia Delicatessen, cuatro soberbios lomos de un buey de fornidas hechuras criado en inmejorables condiciones en una granja lucense. La ocasión bien lo merece así que el Ruedo convoca a partir de hoy a su parroquia a dar buena cuenta de tan suculenta propuesta en unas jornadas del chuletón de buey que tendrán por duración lo que duren los cuatro lomos. Chuletones, por lo general, que sobrepasan de largo el kilo de peso, que destacan por su intenso color rojo agranatado, su grasa amarillenta y untuosa y, sobre todo, por la extraordinaria potencia de su sabor.

Como ya es habitual en las jornadas cárnicas del Ruedo, los chuletones se sellan primero en la parrilla del local para a continuación colocarlos troceados en la mesa -cada una de ellas cuenta con su propia plancha dotada de extractor-, para que el comensal le dé allí el punto final que desee.

Pero no solo de carne vive el comensal. Y menos en esta época del año. Así que, además de las jornadas del chuletón de buey el Ruedo mantiene también vigente sus jornadas del cocido. Hasta finales del mes de marzo, todos los martes y jueves, el asador vilagarciano ofrece al mediodía un suculento y completo cocido. Elaborado con materia prima de primera calidad. En lo que a carnes se refiere todos los productos son de procedencia artesanal de la prestigiosa y certificada firma Embutidos Lalinense.

Además de los martes y los jueves, el Ruedo también ofrece la posibilidad de degustar su cocido cualquier otro día, siempre para grupos y bajo encargo previo.