La Fiesta del Albariño de Mallorca abre otra fisura en el cuatripartito de Cambados

Bea Costa
bea costa CAMBADOS / LA VOZ

AROUSA

ADRIÁN BAÚLDE

Frente a la negativa de Abal a financiar el evento, el alcalde garantiza que el Concello buscará una vía de colaboración. Pazo de Rubianes recogió este viernes el primer premio del concurso

22 nov 2024 . Actualizado a las 17:10 h.

Mallorca celebra desde hace tres décadas su particular fiesta del Albariño. Poco tiene que ver con la cita de cada verano en Cambados, pero se ha consolidado como un escaparate para proyectar los Rías Baixas fuera de Galicia. Tanto es así que casi todos los hoteles de máxima categoría de Palma de Mallorca incluyen estos vinos en las cartas de sus restaurantes y del albariño se habla, también, en la prensa alemana e inglesa que leen los turistas que visitan la isla.

Así lo afirma Antonio Seijas, el hostelero que junto al ex alcalde, Santiago Tirado, puso en marcha la iniciativa y que hoy volvió a Cambados para entregar los premios de la última edición. Van 27 y habrá una 28, a pesar de las trabas surgidas este año. El concejal de Enoturismo, José Ramón Abal, se negó a financiar la fiesta con los 3.000 euros que le reclamaba la organización porque, aunque el edil apoya y aplaude este tipo de iniciativas, considera que no deben ir a costa de las arcas municipales. ¿Qué pasará en 2025?

El alcalde, Samuel Lago, no entró en pormenores, pero afirmó que habrá «colaboración». «Se non é por unha vía será por outra», indicó a preguntas de la prensa. Tanto Lago como Seijas argumentan que la Fiesta del Albariño de Mallorca ofrece una gran publicidad no solo para los vinos Rías Baixas sino también de la marca Cambados y O Salnés como destino turístico. «Durante más de un mes se habla del albariño en Mallorca», indicó el empresario. Confía en que los problemas surgidos con la financiación se solventen y mantiene su apuesta por un evento que, afirma, implica cada vez a más sectores. Entre los colaboradores de la fiesta figuran la Asociación de Hosteleros Playa de Palma, la Escuela de Hostelería de Baleares y la Asociación de restauración de Mallorca. Con todo, echa de menos una mayor apuesta por parte de las bodegas y, aprovechando ayer el acto de entrega de premios, hizo un llamamiento a la participación.

El oro, para Pazo de Rubianes

A la cata a ciegas celebrada la pasada primavera acudieron alrededor de 40 bodegas con unas 70 marcas de vino. Finalmente fueron seis los galardonados: el primer premio recayó en García de Caamaño, de Pazo de Rubianes (Vilagarcía); el segundo fue para Davide (Vilanova); el tercero se lo repartieron Terra de Mareas (Meaño) y Trailará (Barro) y los accésit fueron para Lagar de Cervera y Señorío de Rubiós.

Representantes de las bodegas se desplazaron este mediodía a Cambados para recoger sus diplomas de la mano de Samuel Lago y Antonio Seijas en un acto celebrado en el salón de plenos que terminó con un brindis.