La Xunta no pagará la depuradora de A Illa, pero está dispuesta a financiar con 1,3 millones obras para la mejora de la red de saneamiento

AROUSA

Augas de Galicia alega motivos de «eficiencia» para optar por esta vía frente a las pretensiones del PSdeG-PSOE
05 feb 2025 . Actualizado a las 21:13 h.La Xunta de Galicia no va a contribuir económicamente en la construcción de la nueva estación depuradora de aguas residuales (EDAR) de A Illa, en contra de lo que le solicitó este miércoles el PSdeG-PSOE en comisión parlamentaria. Los socialistas consideran que la administración autonómica debe contribuir a sufragar el 20 % de los 7,5 millones de euros que cuesta la obra —el 80 % los financia la sociedad estatal Acuaes con cargo a los fondos Next Generation—, pero no va a ser posible.
A preguntas de la diputada Paloma Castro, el director xeral de Augas de Galicia, Roi Fernández Añón, explicó que el protocolo de actuación que se aplica con el Estado a la hora de canalizar los fondos europeos hace más «eficiente» que la Xunta de prioridad a otro tipo de inversiones, como ocurre en A Illa, donde, en vez de colaborar con la depuradora se opta por la posibilidad de invertir 1,3 millones de euros en renovar la red de colectores del servicio de saneamiento. «El organismo hidráulico regional siempre ha estado dispuesto a colaborar tanto con el Ayuntamiento como con el Gobierno central para mejorar el saneamiento de A Illa de Arousa, pero son sus decisiones internas las que han impedido una mayor implicación o inversión de Augas de Galicia en la mejora de la red de saneamiento de este municipio», abundan desde la consellería a preguntas de este diario.
«El director de Augas de Galicia reiteró hoy en el Parlamento la mano tendida de la Xunta para alcanzar un acuerdo para poder llevar a cabo esta actuación, que está incluida en los presupuestos de la Comunidad Autónoma -una buena muestra de la voluntad del Gobierno gallego para que salga adelante-, pero es necesaria la implicación del Gobierno local para poder llevarla a cabo y solucionar así las grandes necesidades de depuración del municipio de Illa de Arousa», añaden las mismas fuentes
En todo caso, el criterio que aplica la consellería no es un impedimento para que la EDAR se haga. De hecho, ya han empezado los trabajos previos consistentes en la tala de los árboles de la parcela situada en Niño de Corvo y, según las previsiones del alcalde, pronto empezarán a verse las máquinas levantando la cimentación.
Acuaes adjudicó el pasado septiembre la obra, lo que obligó al Concello a buscar una fórmula para financiar el 20 % que le corresponde según el convenio suscrito en su día. El gobierno local no tardó en encontrar la solución acordando en pleno una prórroga de veinte años del servicio de suministro de agua potable en favor de la concesionaria Espina y Delfín a cambio de una compensación de 1,7 millones de euros. No obstante, el PSOE no tiró la toalla y prueba de ello es la pregunta parlamentaria presentada esta mañana, que, como cabía esperar, no sirvió para que la Xunta cambiase de opinión. De lo que sí presumen los socialistas es de que quedara constancia en el acta de la sesión el compromiso de Augas de Galicia de que invertirá 1,3 millones de euros en el saneamiento del municipio, que redundará a su vez, en el saneamiento de la ría de Arousa.
Paloma Castro no dejó de hablar de «discriminación» hacia A Illa respecto a otros concellos gallegos a lo que Fernández Añón respondió afirmando que las inversiones en su departamento no atienden a colores políticos de los gobiernos locales.

El proyecto que acaba de arrancar en Niño de Corvo tiene un plazo de ejecución de 25 meses de manera que, si nada se tuerce, en el año 2027 debería estar finalizado. En todo caso, la EDAR no empezará a funcionar de forma inmediata pues precisa un período de fase pruebas antes de ponerla a pleno rendimiento. En consecuencia, la actual depuradora todavía seguirá operativa alrededor de tres años, un plazo en el que el Concello tratará de mejorar la red de canalizaciones con obras como las que anunció el director de Augas de Galicia.
La futura estación de aguas residuales está diseñada para atender una población de 10.000 habitantes, el doble del censo actual lo que garantiza la cobertura al total de la población, también en agosto, cuando se multiplica debido a la afluencia turística.