Los nuevos apóstoles del rock psicodélico no llegaron de Woodstock

La Voz

CAMBADOS

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La del domingo en el Krazzy de Cambados será la única actuación del grupo barcelonés Holy Bouncer en Galicia

22 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Medio siglo se cumple en este 2019 de la celebración del mítico festival que abrió las puertas y los oídos a toda una generación. Los cuatro componentes de Holy Bouncer no eran ni proyecto cuando en las praderas de Woodstock se incendió la psicodelia. Pero sus ecos -e incluso su estética- resuena en cada una de las composiciones de este cuarteto barcelonés.

Tiene Holy Bouncer detrás una historia entrañable. Bernat Cuyàs, Manu Abel, Jordi Figueras y Miguel Robres se conocieron en primero de preescolar de un colegio en Barcelona. En la adolescencia tuvieron la feliz idea de montar una banda para aprender a hacer música. Y ahí siguen. Y de qué manera.

De su vigente estado de forma da fe el que el año pasado Holy Bouncer formaran parte de los carteles del Primavera Sound, del FIB y del Mad Cool, además de haber girado por Europa y China. Ahí es nada.

No en vano son ya considerados la principal referencia peninsular de la nueva psicodelia. «Tocamos rock psicodélico y tenemos influencias que van desde el rock de los 60 y 70 hasta la música actual», dicen ellos a la hora de situar sus referencias. «Desde The Doors a Tame Impala, Arctic Monkeys o Daft Punk».

«No son un producto de laboratorio. Están hechos de lo que han comido», apuntan desde su discográfica. Y entre su menú, además de los citados, estuvieron también Blink 182, Offspring, Sum 41, System of a Down, RHCP o Eminem, según han reconocido en una reciente entrevista.

Mezclando aquellos sonidos de los setenta junto a referencias más actuales, han conseguido Houly Bouncer una explosiva mezcla de sonido que definieron en un primer momento como «hippie rock». Corrían los años en los que publicaron su primer disco, Anticipation (2015). En el 2018 llegó el segundo, Holy Bouncer, y la definición ya no tenía tanto sentido. «Con el tiempo evolucionas personal y musicalmente. No es algo intencionado sino fruto del paso del tiempo y de que estamos todo el día escuchando nueva música», dicen.

El hippismo fue dejando paso a un rock psicodélico más refinado, cercano por momentos al R&B, con los sintetizadores ganando en protagonismo y guiños de contemporaneidad.

No ha hecho falta mucho más. La crítica los ha catapultado a la condición de los nuevos apóstoles de la moderna psicodelia, hoy tan en auge. El domingo visitan el Krazzy Kray de Cambados en la que será su única actuación en Galicia de esta gira.