Un atropello en Catoira y varios heridos en otros accidentes en Vilagarcía, Valga, Cambados y Vilanova
CATOIRA
El mal tiempo está pasando factura en las carreteras arousanas
09 ene 2025 . Actualizado a las 15:54 h.El temporal no está siendo un buen aliado para el tráfico. La red vial arousana registró varios accidentes en las últimas horas con saldo de heridos. A primera hora de la mañana las alarmas saltaban en la PO-548 a la altura de Abalo (Catoira) como consecuencia del atropello de un vecino de Vilagarcía que fue trasladado al Hospital do Salnés con heridas en la cabeza y las extremidades. Según informa Protección Civil de Catoira, el hombre se disponía a cruzar para ir al bar situado en este lugar cuando fue alcanzado por un vehículo.
Un par de horas después se registró otro accidente en el vecino municipio de Valga que acabó con un coche volcado y una mujer herida. Ocurrió en la EP-8501, en el lugar de Martores, debido a una salida de vía. La mujer, que logró salir por su propio pie del vehículo, tuvo que ser trasladada en ambulancia aquejada de dolor de cabeza y en la espalda, según informa la agrupación local de Protección Civil. Y al mediodía, el Servizo Municipal de Emerxencias de Cambados acudió a la PO-549 a su paso por Corvillón por otro siniestro. Fue el segundo en menos de 24 horas. Ayer miércoles se registró otro accidente en la rotonda de Vilariño en el que resultaron heridas dos personas: el conductor del vehículo implicado, R.P.C.. de 56 años, y la copiloto, M.A.A.G. de 43 años y vecina de Cambados, que fue trasladada al Hospital do Salnés. Ninguno de los dos presentaba heridas graves.
Vilagarcía no quedó al margen del parte de incidencias del día. Este mediodía un coche se salía de la vía en la PO-548, a la altura de Bamio, en este caso sin heridos.
Ayer hubo otro tráfico en Vilanova. A las 18.45 horas en la PO-531 a su paso por Baión (Vilanova), cuando un coche y un camión colisionaron lateralmente. Uno de los conductores fue trasladado en ambulancia y el otro resultó ileso. El suceso movilizó al 061, a los Bombeiros do Salnés y a la Guardia Civil de Tráfico, que se encargó de regular el tráfico, aunque no pudieron evitar las retenciones que provocó el accidente.