Ni el CEE vilagarciano ni el CPI de Ribadumia: ambos se quedan sin enfermera por baja de la trabajadora
RIBADUMIA

60 alumnos con necesidades especiales se verán privados de un servicio vital hasta que Educación no cubra ambas vacantes
03 oct 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La problemática que afectaba al Colegio de Educación Especial (CEE) vilagarciano y al CPI Julia Becerra de Ribadumia se verá agravada a partir del día de hoy debido a la baja laboral causada por la enfermera que se encontraba desplazada en el segundo centro.
La trabajadora, que originalmente prestaba servicios sanitarios en el CEE, pero que fue trasladada bajo directrices de la Xefatura Provincial de Educación hace tres semanas al colegio de Ribadumia debido a la necesidad de atender a una estudiante de ese centro, dejando así al primero huérfano de servicio asistencial, habría solicitado, según representantes de la ANPA del CEE, la baja laboral.
Esto significa que ambos centros quedan ahora mismo desprovistos de un servicio que puede resultar vital para 60 de sus alumnos: los 59 del CEE, todos ellos con necesidades especiales y 23 de los cuales se encuentran en alerta escolar y sanitaria —lo que significa que pueden ser aquejados en cualquier momento por crisis nerviosas, respiratorias o epilépticas, entre otras dolencias—, y la estudiante del CPI de Ribadumia. Todos ellos necesitan asistencia sanitaria constante durante el horario escolar.
El traslado de la profesional a Ribadumia supuso el comienzo de las protestas por parte de padres y madres del centro vilagarciano. A comienzos de esta semana iniciaron una huelga que tuvo el seguimiento del 70 % del alumnado durante los tres primeros días.
El miércoles fueron notificados de que la enfermera que normalmente había atendido a sus hijos en el CEE volvería durante un día al centro, debido a que el jueves la alumna del CPI Julia Becerra no podría acudir a clase.
Ante estas noticias, los padres acordaron llevar a sus hijos a clase. Entre ellos, Concepción Ventoso, presidente de la ANPA, quien tuvo la oportunidad de hablar con la trabajadora, que le informó de la baja.
La Consellería de Educación afirmó conocer desde el pasado lunes la solicitud de baja y explicó que desde entonces se encuentran intentando cubrir ambas vacantes, «aínda que existen dificultades de cobertura do SEPE». Desde el ANPA apuntan a la precariedad de las condiciones laborales ofertadas como motivo por el que no se hallan sustitutos.