Los ribeirenses llegaron a la final del programa «A terra dos prodixios»
29 nov 2008 . Actualizado a las 02:00 h.Ellos se lo pierden. Eso debieron pensar los vecinos de Corrubedo cuando, tras una gala de infarto, las dunas no fueron elegidas la mejor joya del patrimonio gallego en el programa televisivo A terra dos prodixios -emitido por la TVG y producido por Voz Audiovisual-. Una treintena de ribeirenses vivieron la final en directo y, aunque sus rostros se entristecieron cuando las llamadas de los ciudadanos hicieron ganador al casco histórico de Ribadavia y no a su paisaje, ellos decidieron despedir el concurso con mucha fiesta. «Pareciamos nós os gañadores», decía ayer una de las residentes.
Ataviados con camisetas azules, los de Corrubedo llevaban la juerga en las venas desde que salieron de casa. No en vano, antes de que arrancase el programa en el que las dunas competían con la Torre de Hércules, el casco histórico de Ribadavia y el Colexio do Cardenal de Monforte, una de las ribeirenses ya consiguió animar al respetable. Ocurrió así. La organización quería que alguien del público cantase. Y la única que se atrevió fue una joven de la tierra de las dunas que entonó el «vivir en Corrubedo que bonito é».
Luego, los treinta defensores del paisaje ribeirense pasaron muchos nervios y también hubo alguna que otra dosis de cabreo. ¿Por qué? Los vecinos lamentaron que el Concello no les apoyase en su causa como el de Ribadavia. «Alí incluso puxeron teléfonos gratis para chamar», decían los residentes. Sin embargo, las quejas duraron poco. Corrubedo tiene buen perder y la noche acabó con champán.