Igor de Souza conquistó Barraña en su primer día

BARBANZA

MARCOS CREO

El delantero debutó el domingo y la grada ya coreó su nombre

14 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La afición del Boiro parece haber encontrado un nuevo ídolo sobre el césped. Tan solo un encuentro le ha hecho falta a Igor de Souza para conquistar Barraña y conseguir que los boiristas coreasen su nombre. El nuevo delantero del club barbanzano agradó en su debut. Un gol y una asistencia engrosaron sus estadísticas, pero, además, hizo un gran trabajo para el equipo. Así lo reconoce su entrenador, José Luis Lemos: «Por su envergadura, potencia y calidad para hacer controles y dar pases, puede generar mucho juego. Para esta categoría es un futbolista muy completo y, por si fuera poco, es una persona espectacular».

El ariete reconoce que se sintió muy bien en su primer duelo con el Boiro. Ayudó la conexión con la grada, que «siempre es una señal de que se ha empezado bien. Ahora hay que mantener el nivel para conseguir el objetivo». La experiencia que posee en el mundo del fútbol de alto rendimiento le permitirá «aportar equilibrio. Tenemos jugadores jóvenes muy buenos y yo espero colaborar al máximo».

Igor se define a sí mismo como «un hombre de área», pero comenta que siempre se adapta a lo que reclama el entrenador como, en este caso, «aguantar el balón para dar tranquilidad al equipo». Esto lo demanda Lemos, sabedor que De Souza ha rodado mucho: «La gente que ha jugado a nivel profesional posee ese gen competitivo tan necesario, que le permite darlo todo en diversas situaciones. Tiene que ser una pieza importante, pero nadie puede relajarse pensando que él solo va a solucionar la papeleta. Todos tenemos que rendir, porque podemos sacarle mucho jugo».

El regreso a Galicia

Tras cuatro temporadas viviendo en Grecia, el futbolista brasileño, aunque tiene pasaporte portugués, decidió que era el momento de regresar a Galicia, una tierra en la que vivió unos buenos años de su carrera: «Los niños están creciendo y la propia familia pedía volver. Aquí me siento como en casa, por la cercanía con Portugal y por el carácter de la gente».

La noticia de que Igor de Souza estaba en tierras gallegas buscando un conjunto en el que jugar corrió como la pólvora entre los clubes de la comunidad. «Queríamos un nueve y habíamos barajado diferentes posibilidades que no fructificaron. Vimos la opción de incorporar a Igor y sabíamos que era difícil por su perfil. Hubo conversaciones y el Boiro insistió e hizo un gran esfuerzo para contratarlo», explica Lemos. El delantero se siente a gusto formando parte de la plantilla del equipo boirense: «Me está encantando todo, el trato que estoy recibiendo por parte de todos es espectacular».

El carácter del deportista también ayuda a que su integración sea fácil. Así, el propio José Luis Lemos afirma que «para un jugador como él es importante encontrarse a gusto y ver que el entorno en el que trabaja es serio, ya que se preocupa por esas cosas. Notó que eso ocurría en Boiro. Además, antes de que llegara hablé con gente que lo conocía y muchos dijeron que es mejor persona que futbolista».

El fútbol en la sangre

Igor de Souza siempre ha vivido con un balón de fútbol pegado al pie. Lo lleva en la sangre. El padre del nuevo ariete del Boiro era defensa, pero «las nuevas generaciones salimos más ofensivos», bromea. Yuri, su hermano, también ha recorrido mucho mundo. Ambos coincidieron en el Pontevedra, donde también jugaron al lado de su primo Charles, que actualmente milita en el Eibar tras pasar por Málaga y Celta.