Los organizadores de San Roquiño se rinden a sus vecinos

Carlos Peralta
C. Peralta RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

Este viernes se despide la última de las grandes fiestas del año

29 sep 2022 . Actualizado a las 20:13 h.

Las fiestas de San Roquiño regresaron con todos sus alicientes: sus tradicionales misas en la capilla de Tállara, sus procesiones, sus gaitas y sus orquestas. También regresa una de las competiciones más sanas de la comarca: la batalla por ser el mejor organizador.

Un balance amistoso en el que las seis cabezas visibles se reunirán en un local para hacer cuentas y homenajear al vencedor, elegido por el clamor popular de sus compañeros y de los vecinos, los verdaderos protagonistas. «Gracias a ellos tenemos estas fiestas», apunta Manuel Ángel Moledo, responsable del viernes, en conmemoración de Nosa Señora de Fátima. El compañerismo y el apoyo mutuo es una norma básica en la comisión de fiestas de Tállara. Así lo atestigua Elena Abeijón, debutante en el cargo en los lunes de San Roquiño, que destaca la colaboración y los buenos consejos de sus homólogos.

Manuel Miguéns, representado este jueves por su inseparable hermano José Francisco, es el organizador más veterano, con más de sesenta años al frente de los festejos del miércoles.

Para Antonio Castro, responsable del domingo desde hace casi tres décadas, todo empezó con un reto de su esposa y su suegro. «Me dijeron que no era capaz, luego cogí el día y ya no lo solté», afirma Castro.

Este jueves fue el turno de Francisco García, organizador de la jornada en homenaje a Santo Anxo da Garda. Gaiteiro en la agrupación O Son do Pote, él y sus compañeros han aportado todo su repertorio a los seis días festivos.

La procesión dio comienzo con un sol de justicia, por lo que Francisco García podrá decir, un año más, que cuenta con la complicidad del Anxo de Garda, al que considera artífice de la habitual ausencia de lluvia en el día que organiza. Una fecha en la que, además, no faltó la tradicional comida de los gaiteiros de O Son do Pote.

Triunfo y Alianza cierran Nosa Señora de Fátima

Manuel Ángel Moledo, organizador del día del viernes, no acostumbra a repetir orquestas de un año para otro. En esta ocasión, tras dos ediciones en blanco, apostó por Alianza para la hora del vermú, y esta y Triunfo en la última noche festiva en la parroquia de Lousame. «No me gusta que esto sea sota, caballo y rey», remarca el responsable del día, que espera que, si las condiciones meteorológicas lo permiten, sea el día de más afluencia.

Además de tratarse de un viernes, es día festivo en todo el concello. Esta condición supondrá un impulso extra para que San Roquiño cierre su retorno al calendario de celebraciones con numerosos visitantes.

«Lo importante es que los vecinos estén contentos, todo lo que hacemos es para ellos», subraya Moledo, que tras veinte años al frente de los festejos del viernes, señala que todavía tiene cuerda para rato.