Caetano y Millán Horta: «Estaría muy bien competir juntos»

Carlos Peralta
C. Peralta RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MARCOS CREO

El remero que participó en los Juegos de Tokio le aconseja a su hermano que disfrute sin dejar de entrenar duro

03 abr 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El legado de los hermanos croatas Sinkovic en el remo olímpico es casi inigualable. Entre los dos cosecharon, ni más ni menos, que cuatro medallas. La última fue en Tokio, y allí ya estaba Caetano Horta (Noia, 2003). El noiés fue séptimo en el doble-scull, mientras su hermano Millán (Noia, 2007) disfrutaba de sus logros por televisión.

Un año después, Millán empieza a despuntar como remero. Ambos han comentado, entre risas, la posibilidad lejana de imitar a la pareja croata o, al menos, luchar juntos, en la misma embarcación, por un título. Y ya se sabe que, entre broma y broma, la verdad asoma. «Estaría muy bien hacer un largo o competir juntos en un mundial», asegura Millán.

Ambos comparten no solo genes, sino también habitación en casa y pasión por el mismo deporte. El pequeño de los Horta entró en el Club do Mar de Noia en el 2017, cuando Caetano se proclamó campeón de España infantil en doble-scull. Era el primer oro para la entidad «Él, desde pequeño, ha querido parecerse a mí. Siempre ha ido trabajando y consiguiendo muchas cosas», apunta Caetano.

El peso del apellido

Millán sigue las paladas de su hermano, aunque a veces no es sencillo lucir el apellido Horta: «Genera presión porque todo el mundo dentro del remo nacional sabe quién eres y que deberías estar arriba». Paso a paso, empieza a abrirse camino. El pasado mes de febrero se proclamó campeón del Campeonato de España de Larga Distancia.

Caetano ya recorrió las aguas de Millán y es por tanto un manantial de consejos. «Le diría que se centrara en disfrutar y entender lo que es entrenar duro. Es su momento de dar el cambio y esforzarse», remarca el remero olímpico. Millán asiente ante la advertencia de su hermano: «Debería hacer doble sesión, pero cuesta. Sé que lo tengo que hacer».

Caetano recuerda su adolescencia en el Centro Galego de Tecnificación Deportiva de Pontevedra. «Desde cadete entrenaba dobles sesiones cuatro veces por semana. Y los fines de semana hacía otros deportes. Siempre tuve mucho volumen de entrenamiento», remarca el mayor de los Horta.

Millán tiene más sencillo acatar uno de los consejos de su hermano: disfrutar. El Club do Mar de Noia es una de las más firmes canteras de remo en banco móvil en el panorama autonómico y nacional. Y él, junto a Aldara Couce, Brais Vázquez y otros remeros de la entidad, forman el futuro de la entidad. «Creo que ahora mismo estamos mejor que nunca. No hay mucha gente, pero la que está entrena muy bien. Estamos arriba a nivel nacional».

Caetano afronta el año previo a los Juegos Olímpicos de París tras superar un bache a nivel anímico al término de la pasada temporada: «No iba con ganas a entrenar, no estaba al cien por cien. Le dije a la Federación que tenía que tomarme un tiempo para volver a estar bien».

En enero regresó a su querida Noia —y a compartir habitación con su hermano Millán— para reconciliarse con el remo. «Estuve intentando disfrutar más de los entrenamientos en casa, hacer alguna cosa nueva», afirma el deportista barbanzano, que también apunta orgulloso que consiguió sus objetivos del primer tercio del año.

Caetano Horta batió el récord de España de ergómetro y consiguió el triunfo en el Selectivo Nacional. Ahora afronta un calendario con varias fechas claves: dos Copas del Mundo, el Campeonato de Europa del 21 al 24 de mayo y, por encima de todo, el Campeonato del Mundo de Belgrado, del 3 al 10 de septiembre, que definirá los billetes para París.

Millán, que disputará en junio el Campeonato de España, aspira a quemar etapas y, palada a palada, acercarse al sueño de bogar con su hermano en una de las grandes citas del remo olímpico.