Manuel Dios Diz, el pacifista que encontró en Corrubedo su refugio soñado

Iago rodríguez / M. X. B. RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Elena Fernández

El profesor retirado es el fundador del Seminario de Educación para a Paz y tuvo un papel destacado en la Declaración y Plan de Acción para una Cultura de Paz

16 jul 2024 . Actualizado a las 10:03 h.

Manuel Dios Diz nació hace 71 años en Santiago de Compostela, sin embargo, en la actualidad alterna su ciudad natal con la localidad ribeirense de Corrubedo. Él siempre fue un gran aficionado al buceo, actividad que le llevó a elegir Barbanza como un destino habitual de veraneo. Con el paso del tiempo, le cogió cariño a la zona y también a sus vecinos, hasta el punto de que ahora asegura que tiene fascinación por Corrubedo.

En el pasado, solía visitar la localidad ribeirense junto a su familia buscando casas de alquiler, pero cuando les surgió la posibilidad de adquirir un inmueble en las inmediaciones de la playa de O Prado no lo dudaron. Ahora, es mucho más que su segunda vivienda: «Estamos moitas veces aquí no verán e durante o inverno tamén».

Manuel Dios es una persona que lleva prácticamente una vida entera dedicada a defender los valores y principios pacifistas: «Cando comecei a ser profesor tiven unha maior preocupación pola educación pola paz». Para él, las formas de llevar los derechos humanos a las aulas eran mucho más complicadas cuando comenzó a dar clases de Geografía e Historia: «Nese momento a aprendizaxe sobre a paz estaba ausente». Este cambio lo resalta como un gran avance, aunque también tiene claro que «aínda queda moitísimo por facer».

El santiagués presidió y fundó el Seminario Galego de Educación para a Paz, una institución pensada para conseguir un cambio en los centros educativos: «Con el quería elaborar recursos para axudar ao profesorado nas ensinanzas sobre a paz». Asumió este reto durante su etapa como docente y perteneciendo a un sistema sobre el que opina que «está moi obsesionado polos obxectivos curriculares e non polas persoas como tal, deberíase cambiar o plan educativo para reformar moitas materias».

Para él, en la formación intelectual de las personas no solo se debe poner el foco en cómo se enseña sobre la cultura pacifista en las aulas, aunque considere esta parte la más importante de todas: «A paz é a materia pendente do sistema educativo, pero tamén nas propias casas».

En el contexto mundial de la actualidad, los conflictos bélicos son protagonistas, siendo expuestos día tras día y dando a conocer su última hora continuamente. Manuel opina que «a guerra e a violencia son máis vistosas que a educación para a paz e é difícil combater iso».

Proyectos actuales

El profesor retirado se encontraba en su vivienda de Corrubedo cuando le llegó un mensaje inesperado, la posibilidad ofrecida por el presidente de la Fundación Cultura de Paz, Federico Mayor Zaragoza, de convertirse en consejero de la entidad: «Sorprendeume a invitación agora que estou xubilado».

Federico Mayor y Manuel Dios se conocen desde que el primero fue director general de la Unesco. Su visión común de luchar por un mundo más justo derivó en que los dos forjasen una larga amistad, factor que emocionó aún más a Manuel cuando su colega contactó con él: «Sentinme moi honrado».

En la invitación que le llegó para formar parte de la organización se resalta el relevante papel que Dios Diz tuvo en la Declaración y Plan de Acción para una Cultura de Paz, aprobada en 1999, y el último artículo escrito por el santiagués, Cultivar una cultura de paz, que gira en torno a temas como la violencia, las guerras actuales y la propia declaración mencionada anteriormente.

El profesor está ahora jubilado y dedica parte de su tiempo libre a dar charlas en centros educativos y a escribir artículos de opinión para diferentes medios de comunicación y libros sobre la cultura que lleva durante años defendiendo: «Dende que son docente avanzamos xa moitísimo coas publicacións».

Su última obra, ¡Abajo las armas! ¿Dónde está el pacifismo?, trata sobre cómo se encuentra el panorama actual respecto al pacifismo, exponiendo su opinión y la de 32 expertos de la materia.