
El comité de la prueba, que se desarrollará el sábado, diseñó 22 recorridos para cubrir todos los frentes
17 jun 2025 . Actualizado a las 19:28 h.La Regata Frinsa, a la que el presidente del Club Náutico de Ribeira, José Luis Torres Colomer, bautizó como la «romería del mar», celebrará su vigesimocuarta edición el sábado. Fiel a su poder de convocatoria, más de una treintena de unidades ya han confirmado su presencia en la prueba. El comodoro, José Luis Lomba, dio los detalles técnicos de la cita, explicando que se han diseñado 22 recorridos por si las condiciones meteorológicas obligan a aumentar o reducir la longitud.
No obstante, en principio se barajan dos principales: el número uno, solo para las clases regata y regata-crucero, con salida frente al puerto de Ribeira hacia una boya de desmarque, si procede, Sinal do Castro por babor, Rúa por babor, Ter por babor y regreso a Ribeira, de unas 11 millas. La otra es una más corta, de ocho millas, para la clase crucero, que elude el paso por Sinal do Castro respecto al anterior recorrido, coincidiendo en el resto; y se prevé proceder a acortar ambas pruebas por falta de viento con una boya antes de Ter, ya que las tripulaciones tienen que estar en tierra a las 15.00 horas. La salida está fijada a las 12.00.
Torres Colomer explicó que, como las previsiones de viento no son las mejores para el sábado, en la reunión de patrones de las 11.00 se decidirá si es conveniente dar la salida, primero, a la clase crucero, que es la más lenta, y cinco minutos después a las dos restantes, empleando el pitido de salida inicial como señal de preparación para estos últimos.
El nacimiento
Ramiro Carregal, fundador de la prueba, tomó la palabra para hablar de la Regata Frinsa, citando cuatro circunstancias que dieron origen a la misma y en las que fue protagonista: la creación del Náutico de Ribeira debajo del aparcadero de As Carolinas, que hoy no existe; el préstamo de los barcos al Náutico de Portosín, cuando este se fundó y carecía de flota; la hermandad que se estableció entre ambas entidades y que dio origen a una competición amigable que, en una ocasión, no pudo disputarse por el mal tiempo.
Entonces, Ramiro Carregal decidió que todos se fueran a Sálvora, donde compartieron una divertida jornada de la que surgió la idea de repetir la experiencia cada año, hasta que los accesos a la isla pasaron a ser restringidos. Desde ese momento, el almuerzo marinero se celebró en las inmediaciones de Frinsa y, después, en el puerto deportivo de Ribeira.
Carregal también destacó la circunstancia que hace única a la Regata Frinsa, que es que los acompañantes de los deportistas e invitados pueden seguirla de cerca a bordo de dos catamaranes que salen de las inmediaciones del Náutico de Ribeira a las 13.00 horas, cuando la prueba encara la señala de Ter, justo antes de tomar rumbo hacia la ensenada del puerto ribeirense.
El fin de semana del 28 y 29 de junio se disputará la otra gran regata que ampara el mecenazgo de Ramiro Carregal, la Faro de Corrubedo, con salida de Ribeira y llegada frente a Portosín, el sábado; y pruebas técnicas en la ría de Muros-Noia, el domingo.
Torres Colomer aboga por organizar un 25 aniversario especial de la cita en el 2026
El presidente del Club Náutico de Ribeira, José Luis Torres Colomer, recordó que en el 2026 se cumplirá el 25 aniversario de la regata —«un cuarto de siglo», enfatizó— y dejó en el aire la propuesta de organizar un evento náutico especial. Tuvo palabras de reconocimiento a la figura de Ramiro Carregal Rey, del que recordó que es una persona muy querida en el mundo de la vela de Galicia, por todo lo que ha hecho por entidades como la ribeirense o su homóloga de Portosín, así como su apuesta por mantener dos de las pruebas señaladas por los regatistas gallegos: la Frinsa y la Faro de Corrubedo.
Torres Colomer recordó que, precisamente, por ese compromiso se le otorgó hace unos meses la medalla de oro de la Real Federación Gallega de Vela, que solamente se concede a personalidades que han demostrado un apoyo inequívoco a esta modalidad náutica, ya que Ramiro Carregal, además de impulsor del Náutico ribeirense, es su presidente de honor, al igual que del Real Club Náutico de Portosín, y siempre ha estado a disposición de ambas entidades ante dificultades que comprometían su funcionamiento.
Torres Colomer señaló que Ramiro Carregal no solo se vuelca con los cruceros, sino también con la vela ligera y por eso da nombre a la escuela del Náutico de Ribeira.