
El gobierno y el BNG se enzarzaron en un pleno con muchas llamadas a la responsabilidad y un debate poco edificante que dejó las cuentas sin aprobar
31 mar 2023 . Actualizado a las 20:00 h.Por si alguien tenía alguna duda, la campaña para la cita con las urnas de mayo ha comenzado. De hecho, en Boiro están ya metidos de lleno en ella, o eso es lo que parece tras asistir al pleno que la corporación celebró a última hora de este jueves. El intercambio de intervenciones de unos y otros parecía más un debate electoral que la discusión sobre algo tan trascendental como los presupuestos municipales, nada menos. De números se habló más bien poco. Hubo, eso sí, llamamientos a la responsabilidad para dar y tomar, algún que otro exabrupto y puñales volando de un lado a otro de la mesa, especialmente entre el BNG y los grupos del gobierno.
Podría pensarse que, siendo el PSOE el partido que encabeza el ejecutivo local y el PP el grupo mayoritario en la corporación y principal aspirante a arrebatarle la alcaldía a José Ramón Romero, serían estas formaciones las que se enzarzarían en este ensayo de debate electoral. Pero nada más lejos de la realidad, y el portavoz popular fue prácticamente un espectador más de la guerra encarnizada que se libraba en los asientos de la izquierda.
La oposición inició el debate afeando que se presentasen los presupuestos a menos de dos meses para las elecciones. A Antonio García, de ICB, le pareció «un paripé» y criticó con dureza al gobierno: «Non nos chamaron, non nos consultaron, aínda non se dan conta de que non gañaron as eleccións, teñen unha desfachatez e unha arrogancia que me parece unha burla».
Por parte del ejecutivo local, la primera en tomar la palabra fue la edila de Boiro Novo, Dores Torrado, que enfatizó que llevar los presupuestos a pleno era «un exercicio de responsabilidade. Sexa cal sexa o goberno que se elixa en maio terá un documento económico para poder funcionar desde o minuto un». Subió de nuevo el tono con la intervención de la portavoz del BNG, Raquel Suárez: «Nos últimos meses xa houbo o pleno da chantaxe, o da responsabilidade e este podería ser o da responsabilidade dous, aínda que a min chegoume que din que este vai ser o pleno de retratar á oposición».
Cuestionó las prisas por aprobar un presupuesto a menos de dos meses de las elecciones cuando «en catro anos non foron capaces de aprobar un orzamento en tempo e forma», y calificó el documento de «trámite, isto é traer por traer».
Ser útil
El que sí habló de números fue el concejal de Facenda, el socialista Luis Ruiz, para recalcar que la propuesta de presupuestos supera los 15,6 millones de euros, que los ingresos previstos aumentan en más de 1,1 millones y que la previsión a final de año es que la deuda se sitúe en el 24,5 %. Luego pasó al ataque, recordándole a Raquel Suárez que para ser «útil» a Boiro «hai que gobernar e non ser oposición nin a muleta do PP, e vostede foi convidada a participar neste goberno».
Añadió que el ejecutivo no gana nada presentando las cuentas a estas alturas sino que lo hacía por responsabilidad, y que si no se hizo antes es porque se esperó a tener la liquidación del ejercicio anterior para ajustar todo lo posible el gasto porque, con la subida de precios, «hai que adaptar o orzamento á realidade actual».
Sin embargo, el argumento no convenció, tampoco al PP. Fernando García Diéguez se preguntó si el gobierno no sintió esa misma responsabilidad en los anteriores ejercicios en los que no se presentaron presupuestos, y reprochó que ahora se apelara a la responsabilidad de la oposición para sacar adelante las cuentas: «Son os seus orzamentos, e son malos, moi malos, porque non hai unha xestión detrás para conseguir investimentos doutras Administracións».
Los presupuestos no se aprobaron al no contar con el apoyo de ninguno de los grupos de la oposición, pero el debate no acabó ahí, ya que el siguiente punto del orden del día fue una prolongación de la discusión, entre otras razones porque el asunto a tratar también era económico: la aprobación de un crédito extraordinario para el pago de 2,17 millones de euros en facturas con cargo al remanente. Carlos Rodríguez Muñiz intervino para señalar que «estamos cumprindo o noso deber, que é traer os orzamentos» y explicó que no entró en el debate porque «é unha perda de tempo, a decisión dos grupos está tomada de antemán e, se non hai argumentos, inventámolos».
Luego abrió fuego la portavoz del BNG, que acusó al gobierno de mala gestión y de pretender culpar a la oposición de ello, y les dedicó calificativos como «revanchistas, chantaxistas e rencorosos». Luis Ruiz recordó que el remanente de tesorería supera los 3,7 millones de euros, una cantidad más que suficiente para abonar las facturas pendientes; mientras que Dores Torrado volvió a los presupuestos para remarcar que, sin unas cuentas actualizadas, en unos meses volverá a haber facturas sin consignación, al tiempo que afeó al BNG que, a diferencia de Boiro Novo, no tuviera el valor de «mollarse e traballar» sumándose al ejecutivo encabezado por el PSOE para «sacar adiante proxectos progresistas» y, en cambio, se pusieran al servicio del PP.
La corporación rechazó los ataques a símbolos de la memoria histórica
Ni los presupuestos ni el crédito extraordinario para el pago de facturas fueron aprobados pese a monopolizar buena parte de la sesión. Sin embargo, se trataron otros asuntos, y en algunos sí hubo consenso suficiente para sacarlos adelante, si bien solo una de las propuestas obtuvo el voto unánime de la corporación.
Memoria democrática
Todos de acuerdo. La moción de Boiro Novo rechazando y condenando los ataques perpetrados contra los símbolos de la memoria democrática en el municipio fue la única iniciativa aprobada por unanimidad.
Actividades deportivas
Rechazada. El gobierno local pretendía aprobar una comisión para estudiar cómo restablecer el servicio público de las actividades deportivas en las instalaciones de A Cachada, pero PP, BNG e ICB votaron en contra.
Estudio de detalle
Luz verde a Jealsa. Con la abstención del BNG y el voto a favor de los demás, salió adelante el estudio de detalle que permitirá la reordenación de volúmenes en O Bodión para la ampliación de las instalaciones de Jealsa.
AYUDA EN EL HOGAR
Sí a la municipalización. El PP se abstuvo ante la propuesta del BNG para impulsar la municipalización del servicio de ayuda en el hogar, que contó con el visto bueno del gobierno.
Desfibriladores
En instalaciones públicas. La propuesta de ICB para dotar a diversos edificios e instalaciones deportivas de desfibriladores fue aprobada.