Un tercio del dinero que generan las granjas procede de las ayudas de la PAC

MAZARICOS

Las subvenciones públicas continúan siendo un sostén importante y necesario para la supervivencia de la agroganadería de la zona. Tanto es así que uno de cada tres euros netos que generan el millar de explotaciones existentes, entre cárnicas y lácteas, dependen de subvenciones públicas. La práctica totalidad de ellas procedentes de fondos europeos englobados en la Política Agraria Común (PAC).
El pago único, concepto que aglutina distintas líneas de ayuda, como la siembra de cereales, el engorde y sacrificio de terneros o el importe que se recibe por cada kilo de cuota láctea asignada, supone unos ingresos medios anuales para las granjas barbanzanas de 3.000 euros.
Este importe es, debido a las especiales características de las explotaciones de la zona, hasta un 40% inferior al que reciben las del conjunto del Estado. Aspectos como la base territorial, el número de animales o la cuota láctea disponible por cada establo condicionan la cuantía de las aportaciones, hasta el punto de que una explotación ubicada, por ejemplo, en Andalucía o Castilla La Mancha percibe más del triple de ayudas que una de Mazaricos o Lousame.
Prima láctea
Pese a ello, las instalaciones de la comarca percibieron el año pasado, en las líneas de ayuda enmarcadas dentro de la PAC, 4,5 millones de euros. La mayor parte de este dinero es de la llamada prima láctea que subvenciona, con algo más de 4 céntimos de euro, cada kilo de cuota láctea disponible por los productores y de la subvención por cereales, de la que se beneficiaron un millar de titulares.
El resto es de las ayudas que incentivan la cría de especies, la que se concede por el sacrificio de terneros o aquella que prima la tenencia de animales de aptitud cárnica. De esta última línea se beneficiaron 681 granjas, cuyos titulares se repartieron más de 834.000 euros.