Madrid se rinde al talento de Roberto Verino

Marina de Miguel

CARBALLO

14 sep 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

Desde que en septiembre de 1982 presentó sus propuestas estivales sobre la emblemática Pasarela Cibeles, Roberto Verino ha logrado convertirse en un auténtico baluarte de la moda española y referente indiscutible para quienes se precien de «vestir bien». Su apuesta por un estilo gustosamente funcional, protagonizada por el empleo de materias primas nobles, como la lana, el lino o la piel de cordero, han reportado al creador ourensano una extensa trayectoria granjeada con más de cien puntos de venta en todo el mundo y múltiples galardones, como la Aguja de Oro , varias T de Telva o el Prix D'Excellence de la revista Marie Claire.

A ellos se suma ahora la gran exposición con la que el Museo del Traje de Madrid celebra sus bodas de plata en el mundo de la moda. Como se pudo ver ayer durante la apertura de la muestra, a cargo del ministro de Cultura, César Antonio Molina, se trata de un auténtico hito por su carácter excepcional: es la primera vez que el centro dedica una retrospectiva a abarcar el vasto universo creativo de un diseñador.

Colecciones de prêt-à-porter de mujer y de hombre, accesorios, complementos, perfumes, gafas, relojes, cerámica para el hogar... están presentes en esta iniciativa, a través de medio centenar largo de modelos, cuyos tejidos y diseños resaltan gracias a una puesta en escena muy llamativa, además de algunas de las más espectaculares «fotografías de imagen» y de las mejores instantáneas correspondientes a la Pasarela Cibeles.

«Ni su capacidad de trabajo ni su compromiso con las cosas prometidas pueden serle discutidas por nadie, tampoco haber conformado con su nombre una etiqueta que los mayores asocian con la calidad del producto, y los jóvenes, a un sueño de imagen de moda», aseveró Pedro Mansilla Viedma, comisario de este recorrido que madrileños y turistas podrán emprender hasta el próximo 11 de noviembre.

Rodeado de amigos

Como en todo aniversario que se precie, no faltaron a este sentido homenaje numerosos compañeros como los diseñadores Jesús del Pozo, Elio Berhanyer (al que el museo dedicó dos exposiciones de joyas y vestidos de novia), Charo Palacio o Modesto Lomba. Martina Klein, Ana Salamo, Sandra Ibarra, Estefanía Luyk, Inés Ballester, Olivia de Borbón o María San Juan, musas e incondicionales del modisto, también asistieron al evento.