El temporal también recordó a los náufragos del «Serpent»

CARBALLO / LA VOZ

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La intensa lluvia marcó el homenaje a los fallecidos en el hundimiento

12 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El jueves llovía a cántaros. Igual que la noche del 10 de noviembre 1890, cuando las aguas de la brava costa de Camariñas se tragaron al Serpent, un lanzatorpedos de la Marina real británica, y con él a 172 de sus tripulantes (solo se salvaron tres). El jueves, justo a las 22.00 horas, coincidiendo con el 121.º aniversario de la tragedia marítima el azar quiso que la noche fuese casi igual que aquella del siglo XIX y que los participantes en el homenaje a los fallecidos sintiesen en su propia piel una sensación similar a la que los jóvenes marinos debieron de sentir entonces. «Pero ellos sufrieron mucho más viento y un fortísimo temporal en el mar», aseguraba el delegado en Galicia de la Real Liga Naval Española, José Manuel Pato. Con él estuvieron también, el alcalde de Camariñas, Manuel Valeriano Alonso de León; la concejala Maricarmen Linares; Eugenio Domínguez, miembro de la Real Liga Naval, y el escritor Juan Campos, impulsor del homenaje y autor de Náufragos de antaño, un libro en el que refleja que la noche del 10 de noviembre de 1890 la tripulación del Serpent sufrió un tiempo «sucio y oscuro», igual que este jueves.

Pero ni la lluvia ni el viento impidió que los presentes realizasen una emotiva ofrenda floral en el Cemiterio dos Ingleses, donde están enterrados 142 de los náufragos (el resto de los cadáveres no pudo recuperarse). Unos versos y la música constante de la intensa lluvia cerraron un acto «siempre merecido».