El año mágico de Patiño y su Costa da Morte

Paula g. Mosquera / T. L. CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

29 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Un año después de que Lois Patiño ganara el premio al mejor director emergente en el festival de cine de Locarno (Suiza), el vigués sigue recogiendo premios y halagos a su obra, alargando su época dorada en la que se ha recorrido medio mundo.

El corto documental Costa da Morte ha sido el encargado de abrir este martes la tercera edición de la Muestra de cine más pequeña del mundo, que se realiza en la pequeña aldea de Acaso, junto al pirineo aragonés. Un paisaje muy distinto al que muestra la cinta, que tiene como protagonistas a personajes tan propios de la zona como percebeiras o marineros. El autor ya comentaba, tras el estreno del corto en Suiza, que su objetivo era «abarcar el mayor espectro posible de trabajos en su entorno natural, buscando el contacto físico, la lucha con el paisaje».

En sus doce meses de ensueño ha podido presentar su obra en una veintena de festivales cinematográficos de todo el mundo, desde Corea del Sur a Argentina, pasando por Alemania, Francia, el New York Film Festival de Estados Unidos o Uruguay, donde, a principios de este año se le otorgaba el premio al mejor largometraje iberoamericano del Festival Cinematográfico del Uruguay y el reconocimiento del jurado a la mejor película iberoamericana. El último de estos galardones llegaba en abril durante la décima edición del Play-Doc Festival Internacional de Documentales de Tui.

La cinta, sin embargo, sigue sin estrenarse en el paisaje que la inspiró y la Costa da Morte todavía no ha podido ser testigo de esta obra que le ha dado tantas alegrías al cineasta vigués.

Además de los galardones que ha obtenido con este documental, ahora hay que añadir los logros de su actual trabajo. A principios de este mes Patiño seguía su camino de festivales volviendo a tierras gallegas. El vigués presentaba en A Coruña su nueva cinta, Montaña en sombra, con la que recibía el primer premio de la Mostra del Museo de Arte Contemporáneo. Esta largometraje comparte con la anterior la gran importancia del paisaje en el cine, mezclado con una profunda reflexión sobre los aspectos más vitales del ser humano.

La Costa da Morte podría ser el escenario idóneo para terminar esta fantástica etapa de la que disfruta el cineasta, pero mientras este encuentro no se produce, seguro que los premios no dejan de llamar a su puerta.