Además de las fisterras del mundo, donde todo se acababa o eso parecía, hay otras y otros Finisterres. En Coahuila-México, Finisterre está unido con La Coruña por una carretera. No es la 552, sino la 86 estatal. Ambas localidades, muy pequeñas, fueron fundadas por gallegos. Es tal vez la toponimia más curiosa. En Toledo se encuentra el embalse de Finisterre. En Papúa-Nueva Guinea, las Finisterre Mountains. En Castrignano del capo (Lecce-Salento, en Italia, está la basílica de Santa María de Finibus Terrae. En la comarca pacense de Olivenza, donde Extremadura casi se adentra en Portugal, se halla Nuestra Señora de Finibus Terrae, la patrona de El Almendral, que se guarda en la capilla de idéntico nombre, y es moreneta. En Cabezarados (Ciudad Real), no lejos de Puertollano, está la ermita de Finibus terrae, estrenada hace 8 años. Y en Yébenes-Toledo, la de Finibusterre.