Fallece Doña Mari Loli, la profesora por cuyas manos pasaron varias generaciones de camariñáns
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CAMARIÑAS
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María Dolores Tedín Noya dio clases en Camelle, Cereixo, A Ponte do Porto, Arou y A Ponte do Porto
02 jul 2023 . Actualizado a las 23:20 h.Puede que para muchos antiguos alumnos y alumnas de las escuelas de Cereixo, Arou, Camelle y A Ponte do Porto el nombre de María Dolores Tedín Noya no les resulte muy familiar. Pero sí los de Doña, Mari Loli o Doña Mari Loli, por los que era conocida esta mujer, que falleció esta pasada madrugada a los 83 años de edad.
Porque Doña no era una docente al uso. Era una mujer implicada con los más jóvenes, a los que siempre inculcó sus conocimientos y su experiencia para que fueran algo en la vida. Una persona bondadosa, cariñosa, influyente y muy cercana, como la definieron en su entorno familiar.
María Dolores Tedín Noya nació el 29 de octubre de 1939 en Almería, pero por sus venas corría sangre camariñana y vimiancesa. Su padre era oficial de la Marina natural de Camelle y su madre, de Cereixo. María Dolores pertenecía a una familia acomodada, lo que le permitió cursar estudios de Magisterio. Una vez finalizada la carrera, Doña Mari Loli empezó a dar clases en la antigua unitaria de Cereixo, para posteriormente, trasladarse al Concello de Rodeiro (Pontevedra). En el año 1965 obtuvo un nuevo destino: Arou, donde ejerció durante varios cursos antes de tomar las riendas del centro de A Ponte do Porto, en el que además de ejercer como docente gestionó el servicio de comedor, empleado por aquel entonces por unos 200 alumnos y alumnas. Pero siempre tuvo en mente dar clases en Camelle, el lugar que vio nacer a su padre. Y eso que algunos compañeros le recomendaron que no escogiera ese destino porque eso implicaba una mayor carga de trabajo. Pero ella siempre lo tuvo claro y finalmente se salió con la suya. Tomó las riendas de un colegio que por aquel entonces tenía unos 40 alumnos matriculados por curso, desde párvulos hasta segundo de primaria y con un horario de trabajo que abarcaba desde las nueve de la mañana hasta las siete de la tarde, con un descanso de un par de horas para comer.
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Su dedicación profesional y personal no pasaron desapercibidas para los vecinos de Camelle, quienes les organizaron un homenaje cuando se jubiló, unos actos a los que también acudieron numerosos alumnos de Doña. Incluso les dedicaron un cariñoso escrito a su excelsa labor educativa: «Agradecéndolle á Doña as súas ensinanzas». Porque por las aulas de María Dolores Tedín Noya pasaron hasta tres y cuatro generaciones de camariñáns. Uno de esos alumnos que pasaron por sus manos le dedicó estas palabras: «Para Dona Mari Loli, que navegou coas nosas vidas, que sementou cariño nos nosos corazóns e escribiu en nós as verbas do futuro».
Tras jubilarse residió con su madre en Camelle, a la que estaba muy unida. Era una amante de los largos paseos, el punto de cruz y la lectura, sobre todo de libros relacionados con la historia. Cuando enfermó, su familia la llevó para A Coruña, donde falleció esta pasada madrugada a los 83 años.
La misa y posterior entierro se oficiarán mañana, lunes (17.00 horas), en la iglesia y cementerio parroquiales de Santiago de Cereixo. Sus restos serán velados hasta entonces en el tanatorio Grupo Bergantiños de A Ponte do Porto. También se celebrará un funeral en la iglesia de Os Capuchinos de A Coruña. Será este martes a las 20.30 horas.