Vecinos de Fisterra reviven la lucha para retirar la pintura de la iglesia

Juan Ventura Lado Alvela
j. v. lado CEE / LA VOZ

FISTERRA

Ana Garcia

Necesitan cerca de 20.000 euros para un trabajo por el que esperan desde el 2015

28 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El pintado de los arcos interiores y bóvedas de Santa María das Areas de Fisterra, que tanta polémica generó en octubre del 2015, parecía olvidado. Pero no lo estaba, al menos para la Asociación de Vecinos Finisterre y las personas que respaldan la retirada de los enfoscados y la devolución del templo a su imagen anterior. Llevan desde entonces peleando para que se les reconozca su deseo, a través del Icomos o la mediación patrimonial del Incipit, además de buscar una empresa que se hiciese cargo de los trabajos, algo que no ha sido precisamente sencillo. «Tivemos que mirar moitísimas, estabamos desesperados porque ningunha se quería enfrontar a Portela e a Patrimonio, porque polo visto este é un círculo bastante pechado e temían que se lle pechasen as portas para traballar. Unha mesmo se volveu atrás cando xa tiña todo feito», explica José Manuel Valdomar Senra, al frente de la citada asociación, que, básicamente, nació a raíz de esta polémica.

Ahora ya la tienen, la firma pontevedresa Clinarte, que les ha dado un presupuesto de 15.095 euros más IVA y, además, certifica que sus técnicas no dañan la piedra. Por tanto, ahora se trata de conseguir el dinero que, como inciden desde el colectivo, es menos de lo que cobra «un orquestra de prestixio» o lo que «custa organizar un festival de blues». Para ello piden el apoyo de todos, administraciones y otras asociaciones, con lo que pretenden convencer al Concello, la Deputación, la Xunta u otro organismo público, para que sufrague la actuación, ya que se trata de «unha cantidade moito máis baixa ás que estamos acostumados a ver para que recuperen o noso patrimonio colectivo».

Según explica Valdomar Senra, el párroco está a lo que diga el Arzobispado, que, por los contactos mantenidos, no se opone a la intervención, aunque tampoco tiene previsto poner dinero para ello. Algo que también percibieron en Dirección Xeral de Patrimonio Cultura, que en principio era totalmente contraria a retirar los enfoscados pero que, a raíz del informe del Icomos, que definió como una «sobreactuación» esa parte del trabajo de Portela, y la mediación de las profesoras del Incipit, habría abandonado esa postura. Lo que les exige es que se demuestre que no va a haber daños para la piedra y seguir el resto del procedimiento reglado. Ahora bien, al igual que el Arzobispado, ya les ha adelantado que no habrá financiación para esto, más que nada porque a lo largo de la distintas actuaciones el organismo dependiente de la Xunta lleva invertidos en Santa María das Areas en torno a un millón de euros.

La técnica prevista, conocida como «hidro-gommage», promete eficiencia sin dañar la piedra

La empresa Clinarte describe la técnica que emplearían en Santa María das Areas, en caso de que esta iniciativa salga adelante, que se conoce como hidro-gommage, como «totalmente ecológica e ideal para la limpieza de granito, especialmente aquellos que están muy dañados o protegidos por patrimonio histórico», porque «está avalada por numerosos estudios y no daña el soporte».

Consiste de una proyección a muy baja presión (dos kilos por metro cuadrado, frente a los entre 150 y 200 que utilizan las hidrolavadoras convencionales) de agua con minerales agregados de una granulometría inferior a los 80 micras.

Señala la compañía que la combinación y regulación por separado de los tres elementos (agua, presión y áridos) les permite «actuar con la máxima eficiencia y calidad en la gran mayoría de los soportes, incluso en la limpieza del mármol». Dado que «no genera polvo» evita tener que cubrir totalmente la zona a limpiar y que el operario trabaje con escafandra, porque lo que «tiene perfecta visión y control del trabajo que está realizando».

Para corroborar lo afirmado por la empresa, la Asociación de Vecinos Finisterre aporta una certificación firmada por el arquitecto de la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural Alberto Balea Figueiras, sobre los trabajos realizados por Clinarte con esta técnica en abril del 2004 en la Basílica de Santa María A Maior de Pontevedra. Dice que, según su observación, resultó adecuada para eliminar los grafitis «sen que se observe que produza danos nas fábricas de pedra coas presión de traballo».

«Creo que non ten sentido, pero que fagan o que queiran»

 

 

César Portela, Premio Nacional de Arquitectura en 1999, gozó durante años de mucho predicamento en Fisterra, donde es autor de la restauración de O Semáforo, el cementerio de Cabanas o el Plan Director do Monte do Cabo. Sin embargo, su figura se ha vuelto muy controvertida, sobre todo a partir de la última restauración de Santa María das Areas. Una obra que sigue defendiendo, al igual que hizo en su día frente a los vecinos en una reunión más que tensa. «Eu creo que non ten sentido quitar a pintura, porque a pedra que é para quedar á vista xa a deixamos á vista. Todas as igrexas estaban pintadas por dentro e vese nas restauracións, incluída nesta na que apareceron diversas capas durante os traballos. Pero que fagan o que queiran. Eu o que tentei foi deixar unha cousa alegre, que xa bastante tristes están as cousas», argumenta.

Pese a los últimos desencuentros, Portela se sigue considerando un enamorado de Fisterra y se muestra dispuesto a participar en nuevas iniciativas, como la finalización y puesta en servicio del cementerio, que ahora pretende el Concello. «Se hai un proxecto serio, por suposto», dice el técnico, para quien a esta obra lo único que le falta «é vontade, porque habendo vontade o resto todo se supera». De hecho, recalca que se trata de un punto cada vez más visitado, que recibe frecuentemente cometarios al respecto, sobre todo de escuelas de arquitectura, y le parece una pena que no se acabe, porque con solo con los nichos ya hechos entiende que se podría activar perfectamente.

Opina lo mismo del plan director, del que «non se fixo prácticamente nada» y entiende que tendría perfecta cabida en la iniciativa recientemente aprobada en el Congreso en apoyo del Camino y particularmente de la ruta a Fisterra y Muxía. De ahí que lleve tiempo pensando en contactar con el alcalde para ver si prevén algún avance en todo esto.