Manu Baqueiro: «Soy el tío más feliz del mundo viendo a los barcos y las gaviotas»

Melissa Rodríguez
Melissa rodríguez CARBALLO / LA VOZ

MALPICA DE BERGANTIÑOS

BASILIO BELLO

A remojo | «Me vine ya el jueves de noche a las Festas do Mar de Malpica y me pegué una mariscada», cuenta el popular actor, que concursó en Masterchef y que esta semana dio el pregón de los festejos malpicáns

27 ago 2023 . Actualizado a las 11:45 h.

Ha disfrutado del ambiente, los paisajes, la gastronomía, las tradiciones... El actor Manu Baqueiro (Madrid, 1978) se ha empapado de Malpica este fin de semana, donde desembarcó con la excusa de dar el pregón de las Festas do Mar. Es una localidad que lleva en el corazón, pues los veranos de su infancia los pasó allí, rodeado de la cultura marinera. El padre de su hermano y marido de su madre era de A Coruña (falleció), y este era el destino en el que gozaban de las vacaciones. La unión de Manu con este pueblo se hizo todavía más fuerte tras homenajearlo con un postre en la final de MasterChef Celebrity 7 el pasado año.

—¿Es la primera vez que da un pregón?

He dado unos cuantos, pero este es el que más me toca y me emociona porque es algo personal.

—¿Viene con cierta frecuencia a Malpica?

Ahora vengo menos. Me escapo de vez en cuando para darme un homenaje [se ríe] y pasear por el muelle para recordar los viejos tiempos. La familia de mi padre anda por las Rías Baixas, entonces, voy más para Pontevedra, Ponte Caldelas y aquella zona. Intento repartirme.

—¿Conserva algún amigo o familiar en la localidad?

Tengo un par de buenos amigos que son hermanos, Eric y Lolita, porque su padre tenía una motora donde nos llevaba siempre a pescar. Sus padres fallecieron, pero ellos siguen por aquí. Es emocionante volver a verlos de nuevo.

—¿Cuál es el lugar del municipio más especial para usted?

Me gusta la playa, el faro de Nariga... Pero para mí, el lugar más especial es el puerto y el muelle. Soy el tío más feliz del mundo viendo entrar y salir a los barcos y escuchando a las gaviotas.

—¿Cuáles fueron sus planes para vivir las Festas do Mar?

Me vine ya el jueves de noche y me pegué una mariscada con mi madre, mis tías y mis primas en el San Francisco. No me fui mucho a la fiesta porque ese día estuve rondando en Madrid, después agarré un avión a A Coruña y quería estar fresco para el pregón. La procesión marítima me encanta, o sea que seguramente vaya. Xa choveu desde la última vez. Habrá veinte años que no disfruto de las Festas do Mar.

—¿Qué producto es el que más le gusta de Galicia?

Te diría que el marisco, pero, también, los pescados, aunque en Galicia está todo rico. Una buena centolla de temporada... Soy actor, pero no idiota [se ríe].

—Aunque ahora es un cocinillas, se le ve más de disfrutar a la mesa.

Soy un disfrutón. Me encanta la comida y estar con tu gente alrededor de un buen plato. Me parece que es algo muy de aquí y que te hace estar muy a gusto.

—¿Cómo va el verano? ¿Mucho trabajo?

La verdad es que sí porque entre semana estoy todavía con el rodaje de Amar es para siempre, que estamos terminándola, y los fines de semana, con una gira de teatro. Este fin de semana es un oasis de paz.

—Háblenos de esa gira.

Es estupenda. Se llama Una semana nada más, con dos actorazos como Javier Pereira y Marina San José. Es una comedia muy divertida que esperamos traer aquí pronto, al FIOT o a donde sea, y la verdad es que estamos muy contentos, de gira por España. Nos lo pasamos muy bien y me permite oxigenarme un poco del personaje de la serie y salir un poco de viaje. No os la podéis perder porque os lo pasaréis muy bien, seguro.

—El final de la serie va a suponer un cambio en su vida después de tantos años.

Va a ser algo raro. Empezó como una cosa para un año, y luego, tuvo mucho éxito, el personaje también, y hemos ido renovando. Pero todo lo que empieza tiene que acabar. Me va a dar mucha pena, hay que pasar página. A ver qué me depara esta profesión tan incierta. Seguro que los cambios serán para bien.

—¿Ya tiene en mente nuevos proyectos?

Me encanta vivir de esto, me apasiona el teatro. De momento, con esta gira tenemos para uno o dos años. Estoy deseando que salgan otros proyectos televisivos o de cine. Esto es una carrera de fondo. Tengo mis negocios en Madrid, soy socio con otra gente, y van bastante bien tanto el restaurante como las dos cervecerías. En esta profesión hay que tener un plan b que te garantice tener que llevarte a la boca todos los meses porque nunca sabes. Yo he tenido mucha suerte, pero es muy insegura. A abogado no voy a volver [se ríe].

BASILIO BELLO

—El Festival Internacional de Teatro de Outono en Carballo ya está a la vuelta de la esquina. ¿Lo veremos?

En el FIOT estuve en la última función que hice en galego, O Electo, que fue justo antes de la pandemia, y estoy deseando volver. Si no es con un montaje, será para disfrutarlo. Me parece maravilloso. Todo el mundo se vuelca con él y siempre tiene una programación muy buena.

—¿Ha visitado el resto de la Costa da Morte?

He estado por bastantes sitios. La playa de Niñóns me queda cerca de Malpica.

—Su pueblo ha sido recientemente plató de rodaje por partida doble.

Me dijo Tamar Novas que estuvo por aquí hace poco. Esto va a ser el nuevo Hollywood [se ríe].

—Hace kitesurf. ¿Se ve en un futuro viviendo en la costa?

Mi sueño es estar entre Galicia y Tarifa, los lugares que más destaco de España.

BASILIO BELLO

Más a fondo

¿Ha probado las sardinas con cachelos? Sí, y con pan. ¡Que no falte!

¿Sabe dónde queda el Cemiterio dos Ingleses? Tiene que ver con náufragos en la Costa da Morte. Sobre esa historia habla Manuel Rivas en un libro que me leí.

¿Cuál es el único lugar en el que un río desemboca en cascada? ¡O Ézaro! En La Vuelta Ciclista hacen una subida espectacular. Hay que echarle valor. Fue de las mejores etapas de los últimos años.

¿Degustó los percebes de O Roncudo? Hombre, ¡como no! En Malpica encargué unos cuantos.

¿Y el longueirón de Fisterra? Muy rico.

¿Conoce a Eduardo Pondal? La letra del himno gallego es suya.

¿Se bañó alguna vez en la Praia dos Cristais? No la conozco, pero me apunto el plan.

¿Cuál es la catedral del megalitismo? El dolmen de Dombate. Nos llevaba mi madre de pequeños, aún lo recuerdo. Ahora me han dicho que ha cambiado mucho, que está muy protegido.

¿Vio alguna puesta de sol en la Costa da Morte? En Malpica muchas: desde la playa, el puerto, algún mirador... Y con distintos climas, que los tenéis muy variados [se ríe].