Un pequeño Líbano en Palexco

María Vidal Míguez
María Vidal A CORUÑA /LA VOZ

A CORUÑA

En la explanada está instalada una unidad de cirugía habitual en catástrofes

26 may 2011 . Actualizado a las 12:16 h.

El Ejército ha tomado Palexco con motivo de los actos conmemorativos del Día de las Fuerzas Armadas, que se celebran el próximo fin de semana. Por eso, nada más llegar al centro de congresos y exposiciones se halla expuesto un check-point, un puesto de control, similar a los dispuestos en operaciones como Líbano o Afganistán, que dificulta la entrada de vehículos y los obliga a hacer una serie de maniobras por seguridad.

Justo enfrente, en la explanada del recinto, se puede visitar hasta el próximo domingo un escalón de cirugía avanzado, igual al desplegado recientemente como consecuencia del terremoto de Lorca. Estas instalaciones, que son una parte de un hospital de campaña, sirven para atender las bajas, que se puedan dar en los conflictos, con carácter de urgencia. De hecho, aunque dispone de una unidad de hospitalización, no tiene capacidad para atender a un paciente por un plazo superior a una semana, dado que no cuenta ni con servicio de lavandería ni de comida.

Como en cualquier hospital, disponen de unidad de cuidados intensivos, monitor de rayos X, laboratorio de análisis, unidad de odontología, dos quirófanos... Pero además cuentan con aparatos de telemedicina conectados con el hospital Gómez Ulla, de Madrid, por si fuera necesario recibir indicaciones precisas por parte de un facultativo.

Al menos medio centenar de personas, además de médicos especialistas, trabajan en este dispositivo, cuando está desplegado en situaciones de conflicto, que está capacitado para realizar cualquier tipo de asistencia médica excepto «una radiografía en condiciones o una resonancia».

Las instalaciones, dotadas de un sistema de aire frío y caliente, están preparadas trabajar en ambientes nucleares biológicos y químicos. En zonas de combate como Afganistán las bajas más frecuentes suelen ser por exanguinación o neumotórax, que se produce normalmente por la onda expansiva de los explosivos que es más «peligrosa» que el propio material.

En el interior de Palexco varias exposiciones completan las actividades conmemorativas. Una de ellas sobre la expedición geográfica Alejandro Malaspina, que durante ocho años fue prisionero en el Castillo de San Antón, un tiempo que aprovechó para pasar a limpiar los apuntes de su expedición. En la actualidad la expedición se encuentra en Nueva Zelanda realizando un estudio sobre el cambio global en los océanos.