Libros raros, agotados y descatalogados están a la venta hasta el 3 de septiembre en Méndez Núñez
24 ago 2023 . Actualizado a las 02:04 h.El olor a libro viejo acompaña a miles de personas en su paseo por Méndez Núñez. Las Fiestas de María Pita y las buenas temperaturas de agosto invitan a salir a las calles. Paseantes, turistas y coleccionistas se entretienen por las veinte casetas de la Feria del Libro Antiguo y de Ocasión. En su 32.ª edición, se pueden adquirir una amplia variedad de artículos que incluyen volúmenes de segunda mano, primeras ediciones autografiadas, ejemplares poco comunes y raros, manuscritos originales, grabados, mapas, periódicos, revistas, cómics, discos u otros objetos de colección hasta el 3 de septiembre.
En estos primeros días los libreros reconocen estar «abarrotados». Todos coinciden en que al estar en la calle, es una feria muy transitada que cuenta con un perfil de cliente muy variado. «Algunos visitantes vienen de casualidad o con la idea de mirar. También sorprende la cantidad de bibliófilos que buscan completar su colección con ejemplares muy específicos» reconoce Juan Carlos Cachuán, de Madrid Books. En general, la mayoría de clientes no buscan un producto en concreto y se dejan sorprender por lo que encuentran a su paso. También los editores destacan que cada vez hay más presencia juvenil y turistas extranjeros en busca de literatura en lengua inglesa. Como Joe, «estuve un rato buscando y aunque no fue a la primera terminé encontrando varias casetas con libros de lenguas extranjeras», reconoce.
Roberto es un habitual de estas ferias, asegura que es una gran oportunidad para encontrar reliquias y obras que en las librerías son difíciles de avistar. «Normalmente busco ejemplares concretos aunque siempre pico y acabo comprando cosas que no tenía en mi radar», aseguró. Como Marisa, coruñesa afincada en Barcelona. Fue librera durante 4 años y no se suele perder esta cita dada su predilección por la poesía gallega y la literatura escrita por mujeres.
Chechu Alonso, de Librería O Moucho, confiesa que acaba de vender uno de sus artículos más preciados, unos carteles de la Segunda Guerra Mundial que «los enseñé como 20 veces, hasta que llegó un cliente apasionado y los compró». Lorca Libros es una librería de Alcorcón especializada en arte y obras antiguas. Luis Cantero, su dueño, reconoce que su público es «reducido, pasional y bien preparado». En estos eventos se encuentra con muchos coleccionistas, generalmente de las distintas versiones de El Quijote, gracias a que posee una edición conmemorativa del V centenario del descubrimiento de América, con más de 460 grabados de Ricardo Balaga y Jose Luis Pellicer. Está réplica de la obra de Cervantes está a la venta por 240 euros.
Otros muchos visitantes reconocen que los precios son un aliciente importante a la hora de visitar este tipo de ferias. Como Isabel y Carmen, lectoras de toda la vida que compraron varios clásicos de la literatura a precios muy asequibles. «Solemos leer varios libros al mes, así que aprovechamos estas ferias. No nos podemos permitir gastar 30 euros en cada libro que compramos», reconocen. Los ejemplares a la venta van desde 1 euro hasta varios centenares.
Antonio Brea, socio y librero de Librería Arcadia, anuncia que para ellos esta feria es «una carta de presentación para darse a conocer al público coruñés», para el desembarco de Arcadia en la ciudad herculina. Abrirán su primera tienda «en los próximos meses» en la Calle Juan González Rodríguez número 4, dedicada a la compraventa de libros, cómics, vinilos, CDs, DVDs, juegos y objetos antiguos entre otras cosas. Además tienen preparada una serie de talleres que consistirán en cursos y actividades siempre con los libros como protagonistas. Antonio reconoce que el suyo es un «trabajo duro, pero muy satisfactorio». Y destaca de estas ferias la «pasión por la búsqueda» de los clientes.
Desde Libros Pariente, de Valladolid, aseguran que para venir a la ciudad se han preparado con ejemplares únicos de geografía general de Galicia que «tienen más salida en esta tierra». «A esta feria viene 2 o 3 veces más público que a cualquier otra, aunque en las ventas no se ve tan reflejado porque de tanta gente no todos se paran a mirar o comprar», reconocen.