Son Futuro desde el presente

Hugo Álvarez Domínguez A CORUÑA

A CORUÑA

Concierto de la Orquesta Infantil de la Sinfónica en el Teatro Colón
Concierto de la Orquesta Infantil de la Sinfónica en el Teatro Colón Marcos Míguez

Cabe felicitar a Iglesias y Montes por una iniciativa brillante

08 ene 2025 . Actualizado a las 10:24 h.

En vísperas de Reyes, Son Futuro presentó en el Teatro Colón los avances de las orquestas infantiles (día 4) y los coros infantil y joven (día 5). Lo formativo en la Sinfónica de Galicia debería ser elemento diferenciador; sin embargo, los resultados son desiguales. Los coros de niños y jóvenes parecen una iniciativa desligada del espíritu de la orquesta, sin integrarse en sus proyectos ni plantear el repertorio estrictamente clásico esperable (su funcionalidad más allá del divertimento es difusa) pero en las orquestas infantiles hay una apuesta firme por la coherencia lógica y pedagógica en fondo y forma. Convendría reflexionar sobre la utilidad real de estas orquestas infantiles ahora que el proyecto de la Orquesta Joven (sin responsable artístico desde agosto y que verá su encuentro trimestral reducido a un refuerzo parcial de la Sinfonía Alpina con la OSG) parece en situación comprometida.

Lo escuchado el día 4 muestra conocimiento de las funciones del proyecto didáctico. En dos grupos de cuerda (Arcos y Pizzicato) alumnos de hasta 16 años trabajan, en gran medida, arreglos de Peter Martin sobre madrigales, villancicos o pequeñas obras clásicas. Entre los más pequeños (que dirige Enrique Iglesias) se nota rigor interpretativo y estilístico que eleva los estándares de calidad por afinación y empaste irreprochables. Los mayores (al mando de Jorge Montes) se atrevieron con la Sinfonía de los juguetes, de Leopold Mozart (bien tocada por pulso y afinación, pero algo deslucida sin los efectos tímbricos que la hacen singular) o la Suite Don Quijote, de Telemann, no demasiado frecuente y defendida en versión viva, con variedad y contrastes. Todos se unieron en un villancico tradicional africano.

Aquí hay un proyecto didáctico serio, pensado y que da buenos resultados, cuyo salto natural sería el paso de algunos a la Orquesta Joven de la OSG, que tantas alegrías ha dado. Cabe felicitar a Iglesias y Montes por una iniciativa brillante que tendría más sentido si la Joven funcionase a pleno rendimiento.