Alexandra Vidal: «Cada semana ponemos a bailar a más de 1.300 personas»

A CORUÑA

Alexandra Vidal es la directora de la escuela Danza 10, la más grande de Galicia con 22 empleados. Tiene 33 años y dos hijos de 5 y 4
Alexandra Vidal es la directora de la escuela Danza 10, la más grande de Galicia con 22 empleados. Tiene 33 años y dos hijos de 5 y 4 ÁNGEL MANSO

La directora de la escuela Danza 10, la más grande de Galicia con 22 empleados, tiene 33 años y dos hijos de 5 y 4

26 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Sus padres lo tuvieron claro. Cuando su hija nació no dudaron a la hora de elegir cómo se iba a llamar. «Me pusieron el nombre por la protagonista de Flashdance», confiesa Alexandra, Alex, Vidal García. Lo que sus progenitores ni nadie podía imaginar es que años después habría una conexión entre aquella Alexandra, Alex, Owens que interpretó Jennifer Beals, y esta coruñesa de Adormideras. A sus 33 años su vida está centrada en el baile y es la directora de una escuela de referencia, Danza 10, en la calle Gambrinus 95 del polígono de A Grela. Vio cumplido su sueño, como le ocurrió a la Alex de la taquillera película de los ochenta. «Empecé a bailar a los 4 años y sigo. Doy clases de ballet fit y me sirve de entrenamiento. Pero de pequeña hacía de todo gracias a mis padres: natación, gimnasia artística, patinaje, carreras de orientación o piano. Siempre hice mucho deporte y por eso cuando dudaba si matricularme en INEF o Psicología mi entorno me aconsejó la primera opción», relata esta ex alumna del colegio Liceo. Charlamos en el Andén de Riazor. Fuera hace frío y pedimos unos cafés. Se la ve emocionada y cómoda contando su historia, 

Una socia especial

Mientras estudiaba empezó a trabajar como profesora de baile. Su estreno fue en la escuela de danza Soul, que en la actualidad está cerrada. Su primer proyecto propio fue poner en marcha clases de baile moderno en el que había sido su colegio y en el 2016 montó su propia academia. «Buscaba un número que le fuese bien a la palabra danza y escogí el 10 porque se puede asociar con sobresaliente. Le di muchas vueltas. La primera escuela estuvo en el complejo Comcor de A Grela y funcionaba bien hasta que nos anunciaron que el centro se vendía y teníamos que cesar la actividad. Fue terrible pensar qué hacer. Si no llego a tener la suerte de encontrar a una socia como Vanessa Mahía no hubiese podido dar el salto. Ella llevaba a su hijo a clase y le conté lo que pasaba mientras tomábamos un café», recuerda. Entonces, la que ahora es su socia le dijo: «Sé lo que vales y yo puedo ayudarte». Alex lo cuenta y se emociona. Tiene que parar de hablar y secarse las lágrimas. «Que alguien confíe en ti de esa manera es maravilloso. Y me hacía falta alguien como ella, con experiencia empresarial, porque a mí el tema de las facturas, las nóminas y demás es algo que se me escapa. Lo mío es innovar y mantener la escuela viva», resume. 

25 disciplinas

Su sueño, como el de la Alex de Flashdance, se hizo realidad. «Cada semana ponemos a bailar a más de 1.300 personas. Somos una escuela de baile multidisciplinar con más de 25 actividades, somos centro profesional autorizado de enseñanzas oficiales de danza clásica y contemporánea, ofrecemos servicios de entrenamientos personales, quiromasaje, danza fitness, espalda sana y ballet fit, alquilamos espacios, contamos con un estudio de grabación que lleva mi hermano Adrián que es compositor, músico y técnico de sonido. Es un servicio más», resume. Dice que lo que tiene más adeptos son los ritmos latinos entre los adultos y las danzas urbanas entre los jóvenes y universitarios. Tiene dos hijos, Leo, que en febrero cumple 6 años, y Cloe, de 4. «Intento cada día organizarme mejor para conciliar. Siempre me han gustado los niños y la gente te dice que hay que aprovechar el tiempo, que pasa volando, y es verdad», confiesa. Asegura que, a la hora de comer, no se priva de nada pero sigue «una dieta mediterránea. Todo en su medida. Tengo la suerte de que voy a comer a casa de mi madre y me llevo los tuppers», reconoce esta bailarina, profesora y emprendedora que se declara positiva, humilde y sencilla. Tanto que, cuando sale con los amigos, no le gusta destacar. «Soy bailonga, pero no quiero que me hagan el corro. No me gusta llamar la atención».