Un mirador para Vales Villamarín en Paderne

D. Vázquez PADERNE / LA VOZ

PADERNE

 Imagen del archivo personal de Emilio Vila Agra, 23 de abril de 1983, cuando se inauguró el hito en la margen izquierda del río Lambre en Ponte do Porco
Imagen del archivo personal de Emilio Vila Agra, 23 de abril de 1983, cuando se inauguró el hito en la margen izquierda del río Lambre en Ponte do Porco

Impulsan una instalación junto al monolito en honor del historiador, con motivo del 40.º aniversario de su muerte

17 abr 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Ponte do Porco, un núcleo dividido por el río Lambre entre Miño y Paderne, cuenta con un monolito en memoria de Francisco Vales Villamarín (Betanzos, 1891- 1982), pedagogo, profesor, historiador, cronista de Betanzos, académico de la RAG y miembro de la Real Academia de Belas Artes. Es poco visible, aunque estos días hayan recortado los árboles que ocultaban, y el paso del tiempo lo ha deslucido y la inscripción ya no es legible. «A Francisco Vales Villamarín, historiador ilustre de esta comarca. Abril de 1983», es la inscripción que la falta de mantenimiento ha borrado. El monumento fue promovido en su día por un vecino de la zona, el empresario Emilio Vila Agra, cuyo empeño por homenajear a este gran impulsor de la cultura en As Mariñas persiste pasadas cuatro décadas.

Estado actual que presenta el monumento a Vales Villamarín
Estado actual que presenta el monumento a Vales Villamarín

Vila Agra logró en su día el respaldo de Belas Artes y del Concello para instalar el hito en la parte de Paderne, en un espacio vacío que quedó tras la reforma de la carretera y en donde en otra época estaba un reconocido mesón de comidas. Este agosto se conmemora el 40.ª aniversario de la muerte del intelectual y ha propuesto al Concello que limpie el espacio y lo reconvierta en mirador sobre el río, para tenerlo adecentado cuando se cumplan los 40 años de su instalación.

Vila fue también quien promovió el pasado diciembre la rehabilitación, que hizo el Concello de Miño, del monumento a Fernán Pérez de Andrade, O Boo.

Pretende que se lleve a cabo una intervención similar, adecentando un espacio que en estos momentos está infrautilizado, pero que permite una visión espectacular de la desembocadura del río. Convertirlo en un mirador con bancos. «Creo que no hay otro monumento a Vales», comenta Vila, explicando que ya trasladó al regidor de Paderne, César Longo, su propuesta y ha recopilado la documentación que permite conocer la historia del lugar y del monolito.

Vila Agra cuenta con las imágenes de cuando se tiró el petril del antiguo puente en el año 1953, relata cómo algunos sillares no fueron recogidos de su casa, pese a que habían alertado a los operarios y allí continúan. También recuerda que una de las dos cabezas de cerdo que decoraban esa infraestructura acabó en el agua, y la otra fue salvada por su familia, incorporándose posteriormente en la parte de Paderne, donde ahora se puede contemplar si uno se fija, ya que el verdín la mimetiza con el resto de la mampostería.

El mesón, situado en Paderne, en donde comieron los que llegarían a ser dos presidentes de EE.UU.
El mesón, situado en Paderne, en donde comieron los que llegarían a ser dos presidentes de EE.UU.

Dos presidentes de EE. UU.

Este empresario jubilado reconoce que la construcción del puente moderno no solo afeó Ponte do Porco, con un viaducto a otra altura, sino que hizo desaparecer un mesón de comidas que había en la zona, famoso en su tiempo y en donde el 15 de diciembre de 1779 llegó, invitado por el cónsul francés, el estadista y político John Adams, segundo presidente de EE. UU. entre los años 1797 y 1801.

Adams estuvo allí con sus hijos John Quincy (sexto presidente estadounidense entre 1825 y 1829) y Charles, tras tener que permanecer una semana en Ferrol al detectarse una vía de agua en La Sensible, la fragata francesa que los trasladaba a Francia.

Una embarcación junto al muelle que tenía el mesón
Una embarcación junto al muelle que tenía el mesón