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El parque de Oza, un activo para la inversión inmobiliaria: «Cumple la regla del 3-30-300 para mejorar la salud»

VIVIR A CORUÑA

Parque de Oza de A Coruña.
Parque de Oza de A Coruña. Marcos Miguez

Varios desarrollos urbanísticos verán la luz en el entorno del gran área verde urbana, inaugurada hace más de una década

15 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El terreno que dispone el Ayuntamiento de A Coruña para desarrollos urbanísticos es reducido. Salvo grandes superficies como Xuxán o el futuro San Pedro de Visma, el número de fincas urbanizables en áreas más céntricas es limitado. Algunas de ellas se encuentran en el entorno o cercanía del Parque de Oza, una de las grandes áreas verdes de la ciudad que actúa como catalizador urbanístico. «Cumple la regla del 3-30-300 para mejorar la salud mental», cuenta Juan Gómez, director de Márketing y Comunicación de Nozar, grupo que está detrás de la construcción del edificio Montevideo, con áticos con vistas al parque. Un privilegio al alcance del millón de euros.

La regla 3-30-300 es una propuesta del profesor de ecologización urbana y silvicultor holandés Cecil Konijnendijk. Está diseñada para resumir de un vistazo cómo deberían organizarse las ciudades para preservar la salud y el bienestar de las personas, así como la adaptación al cambio climático. El sistema establece que toda persona debería ver tres árboles desde su ventana, tener un 30% de cobertura de copas de árboles en cada barrio y estar a 300 metros de un área verde. Esto sucede en el Parque de Oza, lo que ha despertado el interés de la inversión inmobiliaria, especialmente tras la pandemia, cuando la ciudadanía se dio cuenta de la importancia del contacto con la naturaleza.

Interés inmobiliario en torno al Parque de Oza

Alberto López, de la inmobiliaria Masar, que promociona el desarrollo Parque de Oza en la calle Montes 20, asegura que «tener una zona verde cerca de casa siempre gusta. Se está interesando mucha gente joven». Así, confía en que pronto se ponga en marcha la edificación de la urbanización del API AQ-28, que incluye las parcelas existentes entre el parque y el polideportivo municipal de O Castrillón.

El acuerdo entre el Ayuntamiento de A Coruña y la junta de compensación del Parque de Oza, firmado a comienzos de este mes, también incluye la reordenación del tráfico. «Lo que también supone un activo para la inversión en el barrio», afirma López.

El nuevo planteamiento estipulado en el convenio contempla la actuación sobre seis superficies diferenciadas en el barrio de O Castrillón. Permitirá la puesta en marcha de diversos desarrollos residenciales, así como la creación de más áreas verdes y espacios de ocio para el vecindario. En estos enclaves actualmente existen zonas de maleza y antiguos inmuebles que, por su insalubridad y estado, exigirán su demolición.

Inquietud entre los vecinos de O Castrillón 

Este proyecto mantiene atentos a los residentes de O Castrillón. Ramiro Otero, presidente de la agrupación vecinal, cuenta que se han reunido con el Ayuntamiento para pedir información detallada sobre todo el proyecto: «Hay mucha preocupación. Queremos conocer el proyecto definitivo y cómo se van a dar los pasos para llevar a cabo esa construcción y lo que va a significar para los servicios públicos, que se tendrán que incrementar», comenta.

La principal inquietud de los habitantes del barrio es que el aumento de la población previsto sea demasiado para el equipamiento actual, que aumente demasiado el tráfico y que se construyan demasiados edificios: «No queremos convertir O Castrillón en un Agra del Orzán dos, como los desarrollos urbanísticos de los años cincuenta».

El éxito del Parque de Oza entre los vecinos

El actual Parque de Oza es un éxito de afluencia entre los vecinos de Monelos, Elviña, A Cubela, Os Castros y O Castrillón. Acudir una tarde de verano como las que quedan al mes de septiembre sirve para comprobar lo mucho que disfrutan los más pequeños del barrio, muchos de ellos alumnos del contiguo San Francisco Javier, en los juegos infantiles de la parte baja del parque. Las colinas de más arriba son para el uso y disfrute de los perros, que disfrutan sin correa —en las horas permitidas—. Y los senderos son propios de deportistas y aficionados que corren o pasean a cualquier hora del día.

La inauguración del Parque de Oza se produjo el 15 de enero de 2011 tras una inversión de 4,2 millones de euros en sus 55.626 metros cuadrados de superficie. El espacio conserva la cuesta de O Corgo, que discurre por el antiguo camino que subía desde Monelos hasta la calle Montes, así como su fuente de agua. La primera intervención, además, mantuvo buena parta de la vegetación original y trasladó dos estanques a la parte alta del parque.

El nuevo proyecto en la zona de O Castrillón contempla la recuperación histórica y la reinterpretación del antiguo edificio del Ayuntamiento de Santa María de Oza, que se fusionó con el Ayuntamiento de A Coruña en 1912. «Un bien patrimonial que es fundamental para entender la evolución de nuestra ciudad y también para preservar la memoria histórica de A Coruña», expuso Francisco Díaz Gallego, concejal de Urbanismo, Rehabilitación y Vivienda.