El músico estadounidense Bob Dylan ha cancelado su próxima gira por Asia al saber que el Gobierno chino no ha dado su autorización para celebrar los conciertos que estaban programados para ayer en Pekín y en Shanghái, la próxima semana.
Según publicó ayer el periódico local Sunday Morning Post, los organizadores esperaban llevar a Dylan por Hong Kong, China, Corea del Sur, Japón y Taiwán, pero las reticencias del Ministerio de Cultura chino a permitir las actuaciones en Shanghái y Pekín han llevado a cancelar la gira, pero no los conciertos en Japón. Para el promotor de los conciertos, Jeffrey Wu, el apoyo de Dylan a causas pacifistas y en defensa de los derechos humanos «pueden haberlo convertido en persona non grata en China». El promotor recordó el caso de la islandesa Björk, que en el 2008 gritó «¡Tíbet libre!» al final de una canción durante el concierto que dio en Shanghái, del que no informaron los medios de comunicación controlados por el Estado chino.
Desde ese momento, han sido varios los artistas extranjeros que no han recibido el necesario permiso oficial del régimen comunista para celebrar sus conciertos, como sucedió con Oasis, el rapero Jay-Z y la banda estadounidense Linkin Park.
«Con Pekín y Shanghái fuera, no era posible tocar solo en los conciertos de Hong Kong, Corea del Sur y Taiwán. La oportunidad de tocar en China era el mayor atractivo [para Bob Dylan]. Cuando estos conciertos cayeron, el resto de la gira tuvo que cancelarse», concluyó Wu.