El recién nombrado responsable mantendrá sus funciones como archivero
06 ene 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Quien hasta a ayer fue archivero de la catedral de Santiago fue nombrado nuevo deán de la organización colegiada que debe regir el funcionamiento de la misma. Segundo Pérez fue elegido ayer por el cabildo catedralicio y, horas después, ratificado por el arzobispo de Santiago, Julián Barrio, como nuevo deán de Santiago, cargo en el que sucede a José María Díaz.
Segundo Pérez llegó a la catedral de Santiago para ser archivero y poner orden en un territorio que la desaparición del Códice Calixtino había denunciado como desorganizado. El entonces nuevo archivero llegó con la experiencia de haber trabajado como investigador en los archivos vaticanos y con la necesidad de enmendar una imagen institucional que cada día se aireaba para mal por causa de los detalles que se fueron conociendo en torno al libro central de la tradición jacobea.
Pérez llegó a la catedral, pero no pudo formar parte inmediatamente del cabildo porque todavía estaba adscrito a la diócesis mindoniense. Pero alrededor de ocho meses después de su llegada se solventó el trámite administrativo y pudo pasar a formar del cabildo compostelano. Poco menos de un año y medio después de su incorporación, Segundo Pérez es desde ayer el nuevo deán y mantendrá su responsabilidad como archivero en la catedral. Dos cometidos que había realizado también el anterior responsable máximo catedralicio, José María Díaz.
Cuando llegó a Santiago, el Códice, una de las piezas fundamentales de su patrimonio, había desaparecido. Meses después fue localizado, pero la recuperación no calmó de todo el problema porque los datos que reveló la investigación levantaron una estela de dudas sobre la manera en que se había gestionado el importantísimo patrimonio que la catedral conserva entre sus propiedades.
Tras su nombramiento, el nuevo deán declinó hacer declaraciones aludiendo a la nueva responsabilidad, a la situación difícil de los tiempos y a la necesaria prudencia ante el trabajo que tiene por delante en la organización del templo. El nombramiento de Segundo Pérez como deán de la catedral de Santiago se produce a poco menos de un mes de que se produzca el juicio por la desaparición del Códice Calixtino. Un juicio en el que, previsiblemente, el anterior deán tendrá protagonismo no solo por la desaparición del libro, sino por la gestión económica de la catedral en esa misma época, el dinero encontrado a Manuel Fernández Castiñeiras y que podría proceder de la propia catedral y también por la relación entre ambos que algunas fuentes apuntan como clave.