Toyo Ito, el espacio y la piel

Javier Armesto Andrés
Javier Armesto EL QUID

CULTURA

18 mar 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

En los últimos años, el Pritzker ha alternado arquitectos consagrados, como Souto de Moura, Jean Nouvel o Richard Rogers, con el descubrimiento de talentos que, aunque llevan mucho tiempo en el oficio, no tenían tanta repercusión mediática (por ejemplo, los japoneses Sejima y Nishizawa o el chino Wang Shu). Toyo Ito es de los primeros, sin duda, y habría sido un acierto concederle el medallón de bronce en el 2011, pero en la edición anterior había recaído en sus compatriotas del estudio SANAA. Digo en el 2011 porque habría sido una forma de homenajear a las víctimas del tsunami del 11 de marzo de ese año (el premio se falló a finales de mes) y que afectó especialmente a Sendai. En esta localidad está su proyecto estrella, la mediateca, que aguantó un terremoto de magnitud 9 y cuya concepción espacial lo convierten en uno de los grandes edificios del siglo XX. Ito representa la sensibilidad y la audacia de la arquitectura japonesa, capaz de hacer un edificio (Suites Avenue) en el paseo de Gracia de Barcelona cuya piel dialoga de tú a tú con La Pedrera de Gaudí.