Film Symphony Orchestra: pasión por el cine

Xesús Fraga
Xesús Fraga REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

La Film Symphony Orchestra, dirigida por Constantino Martínez-Orts, en su concierto de A Coruña
La Film Symphony Orchestra, dirigida por Constantino Martínez-Orts, en su concierto de A Coruña MARCOS MIGUEZ

La formación especializada en bandas sonoras ofreció en Galicia sendos conciertos en Vigo y A Coruña en los que sacaron brillo al al amplísimo repertorio de John Williams

02 abr 2019 . Actualizado a las 16:26 h.

John Williams ha creado algunas de las melodías más icónicas y reconocibles del cine. Si algún compositor vivo para películas se merece un concierto monográfico, ese es él, autor de la partitura de títulos que han sido un éxito en buena medida también por su música: de Star Wars a Tiburón, de Indiana Jones a Superman, Williams ha fijado en la memoria colectiva temas que ahora son indisociables de sus protagonistas. El compositor, además, ha sabido utilizar como pocos los recursos orquestales en diálogo con el lenguaje cinematográfico, ejerciendo una notable influencia sobre otros autores, contemporáneos y posteriores.

La Film Symphony Orchestra acaba de ofrecer dos conciertos en Galicia, en Vigo y A Coruña, en los que sacó brillo a una selección de ese amplísimo repertorio de Williams para cine. Lo hizo con un programa bien diseñado, en el que destacaban piezas bien conocidas -Superman o Star Wars- con otras de cintas muy populares -Harry Potter o Indiana Jones- pero extraídas de pasajes de música incidental. El concierto se planteó de esta forma como una exhibición del talento de Williams para ir de la épica a los pasajes amorosos, del suspense a la emoción.

En el capítulo épico se inscribe el arranque del concierto, Summon the Heroes, compuesto para las Olimpiadas de 1996, de un tono espectacular que reforzó la situación de la sección de vientos entre el público. El programa fue diverso en su planteamiento, lo que también permitió el uso y lucimiento de cada sección de la orquesta. La pieza de Atrápame si puedes remitía a los inicios en el jazz del joven Williams, la percusión tuvo su gran protagonismo en el tema de Jurassic Park: el mundo perdido, y el concertino Sean Lucas Mejías se lució con el tema de La lista de Schindler. La FSO también hizo valer su versatilidad, pasando de la inspiración céltica e irlandesa de Un horizonte muy lejano a las melodías inequívocamente del Oeste de The Cowboys. También fue muy interesante la incursión en el formato televisivo, con una introducción a un programa de noticias de la NBC.

La música estuvo apoyada por un sencillo pero efectivo juego de luces

La música estuvo apoyada por un sencillo pero efectivo juego de luces -el rojo sangre del terror de Tiburón, los colores patrióticos de una magnífica suite de Nacido el 4 de julio- y, especialmente, con los comentarios introductorios del director, Constantino Martínez-Orts, quien contextualizó cada interpretación en su película y tiempo, además de inscribir a Williams en sus tradiciones musicales -del jazz a compositores como Charles Ives-, y contagiar una pasión por el cine y la música del compositor que refrendaba la orquesta. Su contundencia quedó patente en la fuerza que transmitieron en el colofón del concierto, el tema clásico de Star Wars, filme al que regresaron para los bises tras una desenfadada y divertida despedida: la marcha asociada a Darth Vader, con los arcos de las cuerdas iluminadas como espadas láser, y la melodía de la cantina espacial, con el público y los músicos en pie, bailando, concluyendo dos horas y media de concierto.

La Film Symphony Orchestra regresará a A Coruña el 7 de abril para interpretar la segunda parte de este monográfico de John Williams.