Una exposición muestra obras de pacientes psiquiátricos a lo largo de 60 años
CULTURA
Los trabajos realizados en un antiguo hospital de Ourense y en un espacio de creación enseñan qué efectos tienen las tareas artísticas en la psicosis
23 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.«De cerca, nadie es normal». Este verso del cantautor brasileño Caetano Veloso es uno de los textos que ilustra la exposición colectiva Escoitar cos ollos, arte e loucura, que hasta el domingo 25 de junio puede visitarse en el centro cultural Marcos Valcárcel que depende de la Deputación de Ourense. La muestra recoge los trabajos que se hicieron desde la década de los años sesenta en el antiguo hospital psiquiátrico de Toén —que fue cerrado en el año 2012— hasta los elaborados en el marco del proyecto Arte Espida en el actual hospital de Piñor por personas con diagnóstico psiquiátrico. Las obras que se exhiben ahora son, en palabras de la médico Chus Gómez, una combinación de clínica y arte, producto de un espacio de creación libre en el que se puede tratar el sufrimiento humano de otra manera, a través del arte. «Os artistas nos ensinan a maneira de poñer límite ao sufrimento ao que as veces non se chega coas palabras. Eles van aprender o que a loucura de cada un de nós pode facer», señaló.
Formas puras de expresión
Raúl Dosouto y David González son dos de los participantes en el taller. David creó un universo en el que quiso plasmar la representación del vacío que, reconoce, todavía le atormenta. Raúl empezó a dibujar, primero sin mucha fe, pero acabaron por gustarle algunas de las caras que llegó a hacer. Hay una pieza colectiva, colajes, pintura o escritos. «Esto es súper honesto, una forma muy pura de expresión», resume David.
Andrés Díaz, profesor en el espacio Arte Espida, explica que su filosofía es la libre creación. No se trata de una laborterapia o una terapia ocupacional. En este caso, cada persona puede llegar, participar o irse. En el fondo se basa, añade Díaz, en los conceptos del psicoanálisis lacaniano y permite comprender qué efectos subjetivos tiene la creación en la psicosis. «Les damos el espacio y las herramientas para que hagan lo que quieran. No les dirigimos, es art brut, sin normas», profundiza Ana Peaguda, otra de las profesoras.
Manuel Cabaleiro Goás
El proyecto tiene un objetivo de inclusión social y está abierto a cualquier ciudadano o artista que quiera pasarse por la planta baja del hospital de Piñor habilitada como taller. Arte Espida da continuidad a lo que, desde hacía 50 años se venía haciendo en Toén, bajo la dirección de la recordada figura del psiquiatra ourensano Manuel Cabaleiro Goás. La fotógrafa Adriana Leira retrató la desolación y las condiciones en las que estaba el hospital en los días previos a su cierre. El equipo psiquiátrico que entró en Toén en el año 2005 recogió e inventarió esa cantidad ingente de obra. Tanto las piezas de entonces como las de ahora reflejan la singularidad de cada persona, con sinceridad, sin técnicas académicas que la oculten.