Rodrigo Marini rueda en O Barco con Juan José Ballesta un cortometraje sobre un músico con párkinson

La Voz O BARCO / LA VOZ

CULTURA

El guionista y director Rodrigo Marini, el coguionista Diego Sabanés y el actor Juan José Ballesta comparten proyecto.
El guionista y director Rodrigo Marini, el coguionista Diego Sabanés y el actor Juan José Ballesta comparten proyecto.

La filmación de «Dopamina cero» comienza este martes y seguirá los próximos cinco días en varios lugares de Valdeorras

08 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Rodrigo Marini vuelve a casa para rodar su nuevo corto documental. Será en O Barco, el lugar que el cineasta argentino considera su tierra, porque en ella pasó parte de su infancia y adolescencia y porque es donde siguen residiendo sus padres. Escribió una obra inspirada en un amigo suyo músico con párkinson. «Si es una enfermedad muy dura para cualquiera, para un músico aún más», remarca. Esos son los únicos datos reales de una historia que es ficción. «No es su vida, pero me ayudó a preparar el personaje», añade Marini, que asegura haberse documentado mucho, leyendo y también trabajando con médicos y asociaciones de pacientes para que el personaje convenciese a los que sufren la enfermedad. «Quería un guion con rigor médico», puntualiza, para reconocer que hasta que vio el caso de su amigo pensaba que el párkinson «era una enfermedad de personas mayores que tiemblan». En la piel del protagonista se pondrá el actor Juan José Ballesta. Es la historia de un joven músico que vive en pareja y con ella afronta su mal neurodegenerativo mientras vive un amor platónico con la vendedora de una tienda de discos de segunda mano. «La música y el amor son lenguajes universales», destaca Marini. El rodaje de Dopamina zero comienza este martes y seguirá los próximos cinco días en varios lugares de Valdeorras. Ya en el anterior trabajo de Marini, Dragón blanco, hay escenas grabadas en la comarca. «Es posible gracias a que mucha gente colabora», señala Marini, desde locales de hostelería y tiendas a bodegas, establecimientos comerciales, el Ayuntamiento y el equipo de fútbol. «Busca concienciar sobre lo que sienten los enfermos y sus cuidadores», detalla. Confía Rodrigo Marini en que en un plazo de entre cinco y siete meses la cinta esté rematada. «El cine lleva su tiempo», concluye.