Aplastó a sus rivales y se llevó la última etapa y la general
15 ago 2006 . Actualizado a las 07:00 h.David Blanco voló ayer durante unos cuarenta kilómetros. Avanzó impasible desde Idanha-a-Nova hasta Castelo Branco. Fue devorando carretera, cronómetro y puestos en la general. Al cruzar la línea de meta, levantó su puño derecho con una media sonrisa. El gallego del Comunidad Valenciana sabía que era el ganador de la etapa y de la Volta a Portugal. Los aspirantes el triunfo final eran conscientes de que última etapa de la ronda portuguesa, la crono de 39,6 kilómetros, era decisiva. Y la lógica decía que, por sus características, lucharían por el podio Héctor Guerra, Candido Barbosa y David Blanco, tercer, cuarto y quinto clasificado. Por la mañana, el corredor compostelano había inspeccionado el recorrido. El veredicto no podía ser mejor: se trataba de un trazado llano y sin curvas, ideal para que Blanco mantuviera un ritmo constante. Podía ser una buena alfombra hacia el podio portugués. Vicente Belda y su pupilo eran optimistas. Y acertaron de pleno. En el kilómetro 11, el primer punto de referencia de la etapa, Guerra cedía 6 segundos con respecto a Blanco, y Barbosa se dejaba 17. Tal y como estaba previsto, el líder de la carrera, Carlos Pinho, iniciaba su viaje hacia el abismo. Demostraba que estaba fuera de la lucha por la clasificación general al perder un mundo: 1 minuto y 20 segundos. Segundo punto intermedio En realidad, el gallego comenzó a enfundarse el maillot amarillo en el segundo punto intermedio, en el que disfrutaba de una ventaja de 1 minuto y 26 sobre Guerra y de una diferencia de 1 minuto 19 sobre Barbosa. A partir de ese momento, se convirtió en el ganador virtual. Sólo le faltaba cruzar la meta para certificar su triunfo. Cuando entró en Castelo Branco, podía ver perfectamente el dorsal de Barbosa. El gran ídolo local había salido dos minutos antes que él, pero había dilapidado su ventaja. Blanco casi consigue doblarlo. Le faltaron sólo ocho segundos. Su registro, de 54 minutos y 53 segundos, dejó a Guerra y a Barbosa a más de minuto y medio. Ninguno de los rivales que optaba a la general pudo acercarse al tiempo del santiagués. Blanco ya es el cuarto ciclista español que ha conquistado la ronda lusa. Sucede en el palmarés a Vladimir Efimkin, vencedor en el 2005. Se lleva dos etapas y el maillot amarillo, éxitos que unidos al triunfo de Gustavo César Veloso (Kaiku) en la quinta jornada de carrera convirtieron esta Volta a Portugal en territorio gallego.